El realizador neoyorquino, que mañana cumpliría 90 años, llevó al cine todo lo que su imaginación le permitió e influyó a los cineastas contemporáneos .
Antes de que Stanley Kubrick se convirtiera en el mítico cineasta que fue, los realizadores no tenían control total de sus lmes. Él fue uno de los primeros cineastas que consiguió ser director, guionista, productor y, en ocasiones, hasta fotógrafo de sus películas, y esto le permitió al neoyorquino pasar de un género a otro en sus más de cuatro décadas de carrera y también que Stanley, quien nació el 26 de julio de 1928, nunca hiciera un lme igual a otro.
En su carrera pasó de realizar lmes históricos (Spartaco, Barry Lyndon) a los bélicos (Fear and Desire o Dr. Strangelove) y más tarde a los dramas (Lolita) sin olvidarse de la ciencia cción (2001: Odisea del espacio) o el terror (El resplandor) para nalmente terminar con un drama conspiracionista (Ojos bien cerrados ). Kubrick inspiró a directores como Martin Scorsese, Steven Spielberg, James Cameron, Woody Allen, Terry Gilliam, los hermanos Coen, Ridley Scott, Christopher Nolan y George A. Romero. Incluso, Orson Welles comentó: “Entre los que yo llamaría ‘la generación joven’, Kubrick me parece un gigante”. Kubrick hasta la fecha ha sido de los pocos cineastas que ha logrado un equilibrio entre crítica y taquilla, al hacer que sus lmes fueran amados por los críticos y, a su vez, le favorecieran en la recaudación en su corrida comercial en taquilla.
Es hasta ahora 2001: 0disea del espacio su lme más taquillero al haber recaudado hasta el momento más de 403 millones de dólares (ajustado a la inación de la época). En México Kubrick tiene una base de fans que cada año crece y que hace que, cuando algo sobre el cineasta de Naranja mecánica se presente, sea consumido inmediatamente.