De acuerdo con fuentes cercanas a la publicación, Anna Wintour, la editora de la revista le ha dado un control sin precedentes a la icónica cantante quien contrató al primer fotógrafo negro que hará la portada en los 126 años de la revista según informó The Huffington Post.
El acuerdo firmado también le da potestad a Beyoncé sobre las fotos de la revista y los textos que acompañan las imágenes que, según revelaron dos personas con conocimiento, la famosa los escribió ella misma en formato largo.
Wintour, una celebridad en sí misma, hasta el momento siempre había ejercido el máximo control en todas las ediciones anteriores de la famosa "Biblia de la moda" incluyendo la selección del vestuario. Quienes han participado de la portada anteriormente no han tenido ningún tipo de decisión sobre sus fotos y reciben la revista una semana antes de que sea publicada.
En este caso, Beyoncé utilizó su influencia y poder para conseguir que Tyler Mitchell, sea quien haga la portada.