El actor dejó clara su postura sobre uno de los coaches que lo ayudaron durante su tiempo de rehabilitación.
A pesar de que Ben Affleck se encuentra mucho mejor tras luchar contra su adicción al alcohol y otras sustancias, ahora el actor se involucró en una demanda que atañe al centro de rehabilitación donde permaneció recluido 40 días hace algunos meses.
Ben manifestó su total respaldo a Noah Levine, quien fundó Refuge Recovery House, un programa alternativo a Alcohólicos Anónimos, luego de que una mujer lo acusara de conducta sexual inapropiada y otros problemas hace un año. Y aunque las autoridades no encontraron fundamento en estos señalamientos, la Junta Directiva del lugar está tratando de expulsar a Levine.
La estrella de Hollywood presentó una declaración asegurando que fue paciente en agosto del año pasado del centro de tratamiento de Recuperación del Refugio después de perder su sobriedad. Además de asistir regularmente a reuniones y recibir terapia personalizada de Levine.
“Trabajar con Noah y su programa de Recuperación del Refugio, literalmente, cambió mi vida. Hoy estoy sobrio, feliz, sano y tengo la custodia de mis tres hijos. Todas esas cosas son el resultado de tener a Noah en mí vida. No sé qué habría hecho sin él”, manifestó el histrión.
“La paciente instrucción de Noah sobre la sobriedad, el budismo, la paciencia, la bondad, la compasión y el perdón forman la base de la base de mi vida actual. Le debo mi vida profesional actual, la vida que tengo con mis hijos, y el sentido interno de ecuanimidad que realmente puedo alcanzar de vez en cuando. (…) Noah es, sin lugar a dudas, la persona con la mayor integridad, el mayor honor, la compasión más genuina y la menos motivada por el interés personal que he conocido”.
