El asesinato de Leandro “Junio” Guzmán-Feliz atrajo la atención nacional hasta el punto de que artistas como Rihanna o Cardi B pidieron justicia por la muerte del adolescente de 15 años de El Bronx, y pusieron el foco en el problema de las pandillas violentas de Nueva York.
Y precisamente para garantizar que los responsables serán castigados, el comisionado de Policía James O’Neill publicó una carta en el Daily News, en la cual señaló que el crimen cometido por los miembros de la banda Trinitatrios fue un “acto indescriptiblemente salvaje” y aseguró que ninguno de los sospechosos arrestados se librará de culpa.
“Las imágenes de él siendo arrastrado de una tienda y luego apuñalado y pirateado repetidamente son la definición de horror”, enfatizó O’Neill.
La madre del adolescente contó que Lesandro quería ser policía y que se había unido al programa de NYPD para adolescentes, lo que da un sentido especial a las palabras del máximo representante de la Uniformada.
“NYPD ha sido el propósito de mi vida por más de 35 años, y cuando pienso en lo que ese joven muchacho podía haberse convertido se me rompe el corazón”, escribió O’Neill. “En el Departamento de Policía tenemos un sentimiento familiar por lo que el asesinato de Lesandro es como perder a un familiar al que todavía no has conocido”.
“Vamos a conseguir justicia y ninguno (de los ocho detenidos) escapará de ello”. Así de rotundo se mostró O’Neill.