Por Miguel Angel HerreraHace muchos años que conocí a Johnny Montaño, mientras me desempeñaba como editor de revistas del Listín Diario.Dentro de las producciones que se editaban en aquella oportunidad, teníamos a nuestro cargo a ESCALA, edición semanal que circulaba los domingos y donde se canalizaba el quehacer artístico del país y del extranjero.
Un día llegaron a mi oficina tres jóvenes, con un proyecto en las manos y miles de sueños. Muchos de ellos cumplidos a lo largo de 17 ó 18 años.
A mi oficina llegaron Johnny Montaño, Pochy Familia y Kinito Méndez.Esa visita afianzó los lazos amistosos que hoy y pese a la distancia y a los años, se mantiene con la fraternidad de aquel día en que nos conocimos.
Tuve la oportunidad de prácticamente darle la vuelta al mundo con ellos. Participé de giras, viajes promocionales y grabaciones en estudios de Los Ángeles y New York.
Hoy día nos mantenemos un tanto distantes…pero esa amistad después solidificada por el empresario artístico Fausto Parra y el periodista José Monegro, se mantiene y de vez en cuando un “recuerdo de viejos” es parte de la vida…
Pero la verdad hay que decirla, Johnny Montaño fue el artífice de esta amistad…y de los éxitos y logros de muchos de los que nos unimos de una forma u otra a ese “EXCLUSIVO CIRCULO”…
calce de foto :
Johnny Montaño y su esposa Ingrid y unos amigos, disfrutando del invierno en los Alpes Suizos
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