A pesar de que han tratado de guardar las apariencias, Letizia de Asturias y sus cuñadas Elena y Cristina sí mantienen un distanciamiento, que de acuerdo con las hermanas, fue a consecuencia de los cambios que la princesa hizo desde su llegada a la familia real.
Cuando se hicieron públicos los problemas en 2007, nadie lo podía creer, puesto que en las reuniones y convivencias oficiales, todos parecían actuar con normalidad; sin embargo, la realidad quedó al descubierto en el libro "Secretos y mentiras en la familia real", de la periodista Pilar Eyre.
De acuerdo con ese texto, el distanciamiento comenzó cinco años atrás, cuando la infanta Cristina, poco antes del bautizo de Irene, su cuarta hija con Iñaki Urdangarín, le preguntó a su hermano Felipe si le podía dar alojamiento a sus suegros, Juan María Urdangarín y Claire Liebaert de Urdangarín, quienes viven en Barcelona e iban a Madrid para el evento de su nieta.
Felipe aceptó la sugerencia, pero cuando se lo comentó a Letizia, ésta montó en cólera y le dijo que no quería gente en su casa ya que estaba muy cansada debido a su embarazo de cinco meses. Cristina tomó muy mal el detalle y le retiró el habla a su cuñada.
Por su parte, Elena está resentida con su hermano, quien ha mostrado poco apoyo a partir de su divorcio con Jaime de Marichalar. De ser tan unidos, los hermanos apenas se ven, dio a conocer la revista "Quién", en su edición nacional.
Otra de las causas por las cuales se han distanciado es también porque a las infantas no les gustan los cambios que se han presentado en la Casa Real tras la llegada de Letizia: Piensan que la princesa no cumple con el protocolo y que la relación con los medios ha cambiado de línea para empeorar.
Por su parte, la reina Sofía adora a su hijo y cree que si él ama a Letizia, lo mejor que puede hacer es apoyarlo, por él, por el matrimonio y por el futuro de la corona.
Pero fue en la boda del príncipe Nicolás de Grecia que se produjo tan esperado encuentro: Cristina e Iñaki, duques de Palma de Mallorca, la infanta Elena y los Príncipes de Asturias juntos después de dos años de distanciamiento.
Sin embargo, eso no fue suficiente, así que se organizó una salida con Elena y Letizia a la representación de "El lago de los cisnes" en el teatro de la zarzuela, donde también las acompañó Victoria, la hija de la infanta.