Andrés
García, quien se encuentra en su casa de Acapulco, recuperándose luego de una
cirugía a la que fue sometido por problemas en la columna vertebral, recibió la
lamentable noticia de que su casa del Ajusco, en la ciudad de México, había
sido saqueada por los amantes de lo ajeno.
Joyas,
relojes, trajes de vestir, unos zapatos de piel de cocodrilo y aparatos
electrodomésticos fueron algunas de las cosas que se llevaron, con un valor
total de aproximadamente 4 millones de pesos.
Cuando le
preguntaron sobre el apoyo que recibe por parte de sus hijos, el actor dijo que
sólo habla con su hijo Andrés, quien radica en Estados Unidos, y “de los otros
dos no sabe nada”, señaló.