MÉXICO D.F. — Aunque parezca insólito, en el megaoperativo para
detener al máximo líder del cártel de Sinaloa, Joaquín "El Chapo"
Guzmán, se llevó adelante "sin un solo disparo", según detalló el fiscal
general, Jesús Murillo.
"El Chapo", el narcotraficante más buscado del mundo desde hace más de una década, fue detenido por miembros de la Marina
junto con un colaborador tras una operación trabajada durante varios
meses, que contó con la colaboración de agencias de los Estados Unidos.
El funcionario señaló que la operación tuvo momentos definitivos
en el último mes. "Entre el 13 y 17 de febrero fueron localizados
algunos domicilios en los que acostumbraba estar" en Mazatlán, puerto
mexicano en el Pacífico. Sin embargo, su captura se dificultó porque estaban conectados con otras casas por medio de túneles y por el sistema de cloacas.Guzmán sabía que la Policía le respiraba en la nuca, pero eso no lo amilanó. Ya en una ocasión, había podido escapar gracias a las puertas reforzadas de acero en una de sus casas.La Policía tardó en abrirla y el jefe narco pudo huir.
El fiscal general indicó que después "hubo varios momentos en que pudo ser aprehendido", pero "la prudencia" les llevó a evitar la detención en "un lugar donde pudiera ser afectada la ciudadanía".
Señaló que esperaron el momento más adecuado, lo que ocurrió ayer, cuando los agentes de la Marina concretaron la captura.Murillo indicó que la operación ha derivado hasta ahora en la detención de 13 personas, pero además de un increíble arsenal.
Según informó se decomisaron 97 armas largas y 36 cortas, un
lanzagranadas, dos lanzacohetes. Además de 16 casas y cuatro ranchos,
entre otros bienes.Con el arresto del capo, el Gobierno mexicano ya ha detenido 75 de los 122 líderes criminales considerados objetivos prioritarios desde que se inició la administración de Enrique Peña Nieto en diciembre de 2012.