La actriz siempre se ha sentido tentada a pasar por el quirófano
aunque admite que es partidaria de la belleza natural de las mujeres.
Aunque podría presumir de ser una de las actrices más atractivas de
Hollywood, Zoe Saldaña estaría planteándose seriamente recurrir a la
cirugía estética para dar un aspecto más explosivo a su figura con un
aumento de pecho.
"Una siempre quiere lo que no tiene y yo siempre he estado obsesionada con los pechos. Normalmente no me gusta nada de lo relacionado con los implantes, pero puede que me opere antes de morir. ¡Quién sabe!", señaló la intérprete a la revista estadounidense Lucky.
Sin embargo, su interés en pasar por el quirófano no contaría con la aprobación de su marido Marco Perego, quien es partidario de que las mujeres deben conservar siempre su belleza natural.
"No soporto cuando oigo a muchos hombres decir que no les gustan las mujeres con los pechos caídos. Creo que no son hombres de verdad porque a una mujer se le tiene que querer por lo que es. Yo diferencio a varios tipos de hombres, según cómo hablen de las mujeres", sentenció la artista al mismo medio.
Con el fin de mostrar en todo momento su gran personalidad, la estrella de Hollywood trata de vestir exclusivamente aquellas prendas que le hacen parecer una mujer segura de sí misma."Quiero que la gente a mi alrededor se dé cuenta de que soy una mujer fuerte. No necesito que nadie me abra la puerta o que nadie me ayude cuando tengo que abrir un tarro, por ejemplo. Si vistes con ropa delicada, eso incita a que la gente te quiera echar una mano, y yo odio esa sensación", aseguró.
Es precisamente su carácter lo que le lleva a llenar el armario con su ropa favorita y a hacer gala de sus preferencias estéticas en cada una de sus apariciones públicas, sin tener en cuenta cómo reaccionará la opinión pública ante su aspecto.
"Me importa una mier** lo que la gente piense sobre mí. Si decido ponerme un vestido y no otro, es porque tengo mis propias razones. Si luego recibo un montón de críticas, no me importa. Soy responsable de mis acciones, tanto para lo bueno como para lo malo", aseveró.
(BangShowBiz)
"Una siempre quiere lo que no tiene y yo siempre he estado obsesionada con los pechos. Normalmente no me gusta nada de lo relacionado con los implantes, pero puede que me opere antes de morir. ¡Quién sabe!", señaló la intérprete a la revista estadounidense Lucky.
Sin embargo, su interés en pasar por el quirófano no contaría con la aprobación de su marido Marco Perego, quien es partidario de que las mujeres deben conservar siempre su belleza natural.
"No soporto cuando oigo a muchos hombres decir que no les gustan las mujeres con los pechos caídos. Creo que no son hombres de verdad porque a una mujer se le tiene que querer por lo que es. Yo diferencio a varios tipos de hombres, según cómo hablen de las mujeres", sentenció la artista al mismo medio.
Con el fin de mostrar en todo momento su gran personalidad, la estrella de Hollywood trata de vestir exclusivamente aquellas prendas que le hacen parecer una mujer segura de sí misma."Quiero que la gente a mi alrededor se dé cuenta de que soy una mujer fuerte. No necesito que nadie me abra la puerta o que nadie me ayude cuando tengo que abrir un tarro, por ejemplo. Si vistes con ropa delicada, eso incita a que la gente te quiera echar una mano, y yo odio esa sensación", aseguró.
Es precisamente su carácter lo que le lleva a llenar el armario con su ropa favorita y a hacer gala de sus preferencias estéticas en cada una de sus apariciones públicas, sin tener en cuenta cómo reaccionará la opinión pública ante su aspecto.
"Me importa una mier** lo que la gente piense sobre mí. Si decido ponerme un vestido y no otro, es porque tengo mis propias razones. Si luego recibo un montón de críticas, no me importa. Soy responsable de mis acciones, tanto para lo bueno como para lo malo", aseveró.
(BangShowBiz)