"Mira qué cosa más linda, más llena de gracia, es esa muchacha que
viene y que pasa...". Cuando, en 1962, Vinicius de Moraes y Tom Jobin
escribieron esta canción llamada La chica de Ipanema, que se acabaría convirtiendo en el símbolo de la bossa nova,
aparecieron muchas jóvenes que se autoproclamaron inspiradoras de la
obra. Sin embargo, solo hay una auténtica chica de Ipanema: Helô
Pinheiro, que se ha convertido en una empresaria y presentadora de 67
años.
Mi vida cambió cuando revelaron que yo era su inspiración, no lo creía
"Yo me crié en un hogar muy conservador, mi padre era militar y no le
gustó nada que fuera el foco de la prensa de todo el mundo y el objeto de las miradas de hombres maduros",
recuerda Pinheiro en una entrevista. "Mi vida cambió cuando revelaron
que yo era su inspiración, no lo creía", dice la musa, que tuvo que
apresurar su boda para aplacar la explosión de celos de su novio cuando
se enteró.
El peor momento relacionado con su fama lo vivió en 2001, cuando los herederos de Jobin y Vinicius la demandaron
por explotar el nombre de Garota de Ipanema, que ella usa en su tienda
de ropa. El conflicto se resolvió el año pasado con un acuerdo por ambas
partes.
Pese a los malos tragos, Pinheiro continúa su balanceo entre nuevos proyectos, como el concurso de belleza que organiza para escoger a la nueva garota de Ipanema.
La bossa nova ha sido la banda sonora de su vida y La garota de
Ipanema es la canción que hasta hoy suena en su teléfono móvil cuando
recibe llamadas. El tema la hizo famosa en Brasil y le abrió la puerta a
trabajar como actriz de telenovelas.