Durante miércoles y jueves los neoyorquinos le han dado un respiro a
los abrigos y a las botas de nieve para disfrutar de días soleados y
temperaturas más agradables. En Central Park, por ejemplo, ayer los termómetros marcaron una máxima de 70 °F.
Sin embargo, se trata de una breve tregua climática,
porque según el pronóstico del Servicio Nacional de Meteorología, las
temperaturas invernales volverán este viernes con un 40% de probabilidad de lluvia con nieve.
Los meteorólogos dicen que el responsable de este cambio sería un
sistema de baja presión que se acerca a Nueva York desde Canadá. Por
ahora, la jornada de este jueves ha estado marcada por vientos fuertes que incluso obligaron el cierre de parte del parque High Line y que podrían prolongarse hasta el viernes.
Se espera que las temperaturas comiencen a bajar durante la noche de este jueves hasta los 30 grados, mientras que para mañana, viernes, se pronostican una temperatura máxima de 41 °F y una mínima de 20 °F.
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