El ex premier italiano también fue inhabilitado de por vida para ocupar cargos públicos. Se lo juzgó por abuso de poder e incitación a la prostitución de menores
El tribunal de Milán condenó a Silvio Berlusconi por haber pagado a cambio de relaciones sexuales con una prostituta menor de edad durante tumultuosas fiestas en su residencia, y por haber usado su influencia para tratar de encubrirlo.
Las juezas del tribunal, que tienen en su
despacho el caso en primera instancia desde abril de 2011, decidieron
una condena para el ex primer ministro italiano superior a los seis años de prisión que había solicitado la fiscal, Ilda Boccassini.
La sentencia no sólo enturbia aún más la carrera política de Berlusconi, sino que
rodea de dudas la viabilidad del precario gobierno de coalición que su
partido, el Pueblo de la Libertad (PDL), sostiene con el Partido
Democrático (PD) del actual primer ministro, Enrico Letta.
Los medios italianos dan por hecho que Il Cavaliere, que en las últimas semanas ha optado por un perfil bajo, prepara una ofensiva televisiva para intentar demostrar su inocencia a la vez que mete presión al Ejecutivo.
Berlusconi está convencido de que detrás de sus procesos sólo está la intención de dejarlo fuera de la vida política, una "conspiración malévola de jueces y fiscales comunistas".
Estas condenas solo serán efectivas después que Berlusconi haya ejercido todas las instancias jurídicas posibles, como los recursos de apelación y la Corte de Casación.