Firmó con Venemusic, y el trabajo que se esperaba que hicieran con ella no se deja ver ni en los "centros espiritistas"…
Ni siquiera han aprovechado el"boom" de que le dieron un Grammy al "featuring" que hizo con Juan Luis Guerra.
En el premio, como se sabe, influyó sobremanera la presencia de Juan Luis.
Pero fue algo como para aprovecharlo al máximo, y sin embargo no han hecho nada.
Venemusic
ha devenido en un sello disquero "bluff", a juzgar de lo que también
han hecho con Héctor Acosta, que si se sigue sustentando es porque se
mantiene pegado con la música que ha hecho en Repúbloca Dominicana, pero
en el ámbito internacional el impulso de esa casa disquera es nulo.
Lo
grande es que su representante aquí Hugo Chávez le consigue firma de
contrato a nóveles figuras, como Issa Gadala, y le venden el sueño de
que los van a promover, y no hacen nada.
El
pobre Issa se ha gastado hasta lo que no tiene impulsando su carrera, y
cuando cree que por firmar con Venemusic va a respirar y dar el salto,
lo dejan como "perico en la estaca".
Aunque
tampoco podemos culpar del todo a la casa disquera. Hoy día el disco no
es negocio. Los artistas, como se puede ver, están grabando solo para
promoción, regalando miles de copias y dejando que cualquiera baje su
música de la internet, o que los piratas los pongan en sus variados.
Y así no puede ser…
El
problema es que si una disquera no va a hacer nada con un artista, para
qué firmarlo?. Sencillamente para engavetarlo o tenerlo amarrado y
luego exigir si se quieren ir….
Pero
volviendo a Milly, no olviden el detalle que ya contamos en una
ocasión, cuando firmó con Sony Disco, que la pusieron a cantar bachata,
pero fue para meter a Melina Leon (la de "Cuando una mujer se quita la
piel") como la nueva reina del merengue. Milly se estrelló como
bachatera, y a Melina "se la comió el león". Pero no un león cualquiera,
sino uno sin dientes, que se la commió "pellizquito a pellizquito". Por
eso fue que "se quitó la piel"...