REEDITÓ EL LIBRO "UN POCO DE MÍ", EL QUE RECOGE SU VIDA Y SU PASO POR LA MÚSICA
Ynmaculada Cruz Hierro
SANTO DOMINGO.- Johnny Ventura tuvo invitados especiales en el lanzamiento de la reedición de su libro “Un poco de mí”. El merenguero invitó a un grupo de estudiantes del barrio de Gualey para contarles de su historia y motivarles a siguir luchando hasta conseguir el éxito.
Johnny les contó que el éxito se consigue en la calle “Preparación”, esquina “Oportunidad”, mas, alertó que los jóvenes de ahora cuentan con la desventaja de que tienen que enfrentar el flagelo de las drogas en cada esquina.
“Yo conocí las drogas a los 27 años y nunca he probado una, porque no iba a permitir que un narcotraficante manejara mi vida. Y eso les digo a ustedes: no permitan que manejen su vida”, advirtió.
El intérprete de “El cuabero” les recordó a sus invitados que su abuela era “mondonguera” y su madre “lavandera” y que no pudo entrar a la universidad a estudiar arquitectura porque la carrera en cuestión era muy cara, pero que buscó la alternativa de estudiar en un instituto técnico y fue allí donde encontró la suerte y descubrió su destino en la música.
“Pero cuando descubrí que mi destino era la música me puse a estudiar música y canto... y cuando ya tenía mi orquesta y tenía que componer canciones volví a las aulas y terminé el bachillerato en Filosofía y Letras, después de haberme graduado, hace años, de bachiller en Matemáticas”, recordó.
Agradece a Dios, cada día que le permite ver junto a su familia un nuevo amanecer, y a sus 70 años recién cumplidos le pidió una extensión de vida, para crear y desarrollar nuevos proyectos.
Actualmente se siente satisfecho con la posición que le dio el presidente de la República como Embajador Especial para la Inversión Extranjera, que se dedica a buscar recursos para que lleguen al país y puedan invertirse en el desarrollo integral de nuestra comunidades.
Ynmaculada Cruz Hierro
SANTO DOMINGO.- Johnny Ventura tuvo invitados especiales en el lanzamiento de la reedición de su libro “Un poco de mí”. El merenguero invitó a un grupo de estudiantes del barrio de Gualey para contarles de su historia y motivarles a siguir luchando hasta conseguir el éxito.
Johnny les contó que el éxito se consigue en la calle “Preparación”, esquina “Oportunidad”, mas, alertó que los jóvenes de ahora cuentan con la desventaja de que tienen que enfrentar el flagelo de las drogas en cada esquina.
“Yo conocí las drogas a los 27 años y nunca he probado una, porque no iba a permitir que un narcotraficante manejara mi vida. Y eso les digo a ustedes: no permitan que manejen su vida”, advirtió.
El intérprete de “El cuabero” les recordó a sus invitados que su abuela era “mondonguera” y su madre “lavandera” y que no pudo entrar a la universidad a estudiar arquitectura porque la carrera en cuestión era muy cara, pero que buscó la alternativa de estudiar en un instituto técnico y fue allí donde encontró la suerte y descubrió su destino en la música.
“Pero cuando descubrí que mi destino era la música me puse a estudiar música y canto... y cuando ya tenía mi orquesta y tenía que componer canciones volví a las aulas y terminé el bachillerato en Filosofía y Letras, después de haberme graduado, hace años, de bachiller en Matemáticas”, recordó.
Agradece a Dios, cada día que le permite ver junto a su familia un nuevo amanecer, y a sus 70 años recién cumplidos le pidió una extensión de vida, para crear y desarrollar nuevos proyectos.
Actualmente se siente satisfecho con la posición que le dio el presidente de la República como Embajador Especial para la Inversión Extranjera, que se dedica a buscar recursos para que lleguen al país y puedan invertirse en el desarrollo integral de nuestra comunidades.
