Sorprendidos y apenados se quedaron más de cincuenta miembros del
Instituto Puertorriqueño Hispano para Personas Mayores de Nueva York,
ante lo que describieron como un “desaire” por parte de la cantante
boricua Yolandita Monge, al no presentarse a la cena de
confraternización que celebraron la noche del miércoles en el hotel
Embassy Suites & Casino de Isla Verde, donde sería homenajeada junto
a otras personas.
Ángel Santini Palos, director de eventos del
instituto neoyorquino, aguardó hasta el último momento por la veterana
artista, alegando que no recibió ningún tipo de excusa de su parte.
“Ella estaba confirmada para la actividad hace más de un mes, así lo
tengo registrado en las comunicaciones escrita que tuve con ella. Ayer
(martes) su representante, Elizabeth Sánchez, me confirmó su asistencia y
me solicitó el programa de la actividad para saber a la hora que tenía
que presentarse”, sostuvo.
Santini Palos lamentó la acción de la
intérprete de Cuando termina un amor, alegando que las personas de la
tercera edad que viajaron a Puerto Rico estaban muy ilusionadas de poder
compartir con la diva boricua. “Me siento triste porque yo admiro mucho
a Yolandita y siempre la he respetado como artista. Por ese motivo no
tomé en cuenta las opiniones que recibí, de que podía ser
contraproducente su figura en la actividad, por los problemas personales
que está atravesando en estos momentos”.
Añadió que, “los
puertorriqueños de la tercera edad que participaron del intercambio
cultural estaban muy contentos y preguntaban por ella todo el tiempo.
Para complacerlos proyecté en una pantalla pietaje de una de sus
presentaciones en el Centro de Bellas Artes de Santurce. En días pasados
la recomendé para que fuera la madrina del Desfile Puertorriqueño de
Nueva York, y canceló su participación dos días antes del evento”,
recordó.