COMUNICADO ZURDO GROUP – ALJADAQUI
La empresa ZURDO GROUP, productora del Evento “Aljadaqui Unplugged: El Retorno” que se realizó el pasado jueves 2 de julio en Hard Rock Café Santo Domingo se disculpa públicamente con todo el público que asistió masivamente por los grandes inconvenientes causados por la falta de aire acondicionado, tema que es responsabilidad del establecimiento donde se realizó el concierto.
Igualmente, lamentamos el vergonzoso hecho de violencia cometido por la seguridad de Hard Rock Café contra un fotógrafo y el productor que fueron agredidos de manera injustificada física y directamente por dicho personal. A la llegada del Señor Arturo Richardson, miembro del equipo de Producción del evento y que además tomaría fotografías para Aljadaqui, fue impedido INEXPLICABLEMENTE Y SIN JUSTIFICACION ALGUNA de tomarlas por varios agentes de la seguridad del bar, quienes lo sacaron brusca y violentamente del establecimiento resultando herido en el pie izquierdo, al percatarse de la situación un fotógrafo del periódico El Nacional quiso fotografiar la escena realizando su trabajo pero no pudo hacerlo, ya que estos agentes de seguridad rompieron su cámara y le propinaron sendos golpes en la puerta del reconocido bar con ánimo de que la noticia del abuso al Productor no saliese a los Medios de Comunicación, lo que se ha convertido en una costumbre en muchas de las actividades nacionales, y a las que se suma Hard Rock Café Santo Domingo.
Algunos de los patrocinadores del evento han repudiado la acción del Equipo de Seguridad de Hard Rock Café, manifestando su rechazo a este tipo de actos violentos y planteándose seriamente apoyar cualquier tipo de actividad que se realice en este establecimiento comercial.
Desde tempranas horas, no han dejado de llegar correos y llamadas de periodistas, miembros del Colegio Dominicano de Periodistas y Medios de Comunicación solidarizándose con estos trabajadores.
Nuestra empresa siente profundo pesar por las agresiones cometidas injustamente contra estas dos personas, que solo cumplían con su trabajo y contaban con la autorización para realizarla. Estamos a la espera de que el establecimiento se haga responsable por estos hechos y de la cara ante los agredidos.