BANRESERVAS

DELTA AIRLINES

DELTA AIRLINES

MINISTERIO DE TURISMO

POPEYE LUISIANA KITCHEN.

POPEYE LUISIANA KITCHEN.

UN NUEVO PLACER....APHOTIC CAB

UN NUEVO PLACER....APHOTIC CAB

INFOTEP

INFOTEP

BANK OF AMERICA

BANK OF AMERICA

GRUPO MEDRANO

GRUPO MEDRANO

COORS LIGHT

COORS LIGHT

viernes, 6 de septiembre de 2019

La triste sociedad en que me toco vivir.

Cuando vemos diariamente los acontecimientos que, en las redes sociales, en la radio y en la televisión se difunden, podemos ver que algo se perdió en nuestra sociedad y que esta generación es y será el último vestigio de una sociedad que antes era sensible, respetuosa y educada.

Por: Mariano Abreu


Prohibiciones absurdas a personas que desean predicar el evangelio en los espacios públicos, uso de cocaína en pleno camino de un cortejo fúnebre, intento de sacar la biblia de las escuelas, entre otras cosas totalmente sorprendentes.
¿Qué nos pasó?
¿Por qué en lugar de auxiliar a las personas que se accidentan, lo que hacen es ir a robarles?
¿Qué nos pasó?
¿Por qué las cuevas han asaltado el congreso?
¿Qué nos pasó?
¿Por qué seguimos votando por los mismos corruptos de siempre?
¿Por qué no despertamos de un letargo tóxico? Cómo aquel vehículo en el garaje de una habitación de un motel que desprende poco a poco su monóxido de carbono, haciendo que las personas caigan en el último punto de su existencia.

Lo que nos pasó fue que nos despegamos de Dios, lo dicen las canciones de reggaetón impulsando el mal vivir, la vanidad y la delincuencia.

Lo que nos pasó fue que nos olvidamos de servir para querer ser servidos, nos olvidamos de aportar y lo que pedimos es que nos aporten.

La sociedad en que me toca vivir se ha convertido en insensible, en indolente, alcanzando los niveles más alto de falta de creencia en sus instituciones, tales como la iglesia, los partidos, los militares, etc.

¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Qué debemos cambiar?

Evidentemente que debemos volver a lo básico (back to basic), a cultivar y criar en valores, a proteger nuestros hijos de la transcultura obscena e irrespetuosa, no nos dejemos convencer de que así es la juventud y así son los nuevos tiempos, no son así en otras sociedades como la Alemana, la Sueca, entonces si se puede.

Mi pueblo ya no ríe como antes, ya no sueña cómo antes, su juventud se pierde poco a poco entre Hookah, alcohol, drogas y música desclasada.

La población estudiantil que logra graduarse no encuentra trabajo digno, le doblamos a los indicadores latinoamericanos en el índice de desempleo, en los últimos lugares de lecto-escritura, lectura comprensiva, matemáticas.

Los maestros hoy ganan mejores salarios que nunca no obstante estar menos preparados que nunca.

No soy catastrófico ni alarmista, pero el futuro que veo me alarma y les confieso que si no hacemos algo al respecto será catastrófico e incierto.