Don Juan Carlos y doña Sofía, el pasado miércoles en Barcelona (Efe)
En medio de la polémica suscitada tras la moda creciente de libros sobre don Juan Carlos y doña Sofía, que les ha colocado en el disparadero informativo -al tiempo que ponen en duda la relación del matrimonio, a punto de cumplir sus bodas de oro-, anécdotas como la del pasado miércoles no hacen sino generar más controversia aún acerca de la conveniencia de la actitud espontánea del monarca para con su estoica esposa, al margen de cuestiones protocolarias.
La pequeña y anecdótica riña del rey hacia doña Sofía durante la entrega, este miércoles en Barcelona, de becas de la Fundación La Caixa, después de que ésta interrumpiera el discurso de su marido para comentarle por lo bajo que los músicos esperaban para tocar y cerrar así el acto, con La Bohème como broche final. El público, que había podido oír perfectamente las palabras de la reina, asistió con sorpresa y risas a uno de los frecuentes arranques de naturalidad del rey patrio. “Ya lo sé, pero déjame hablar un momento”, le espetó.
Fuentes de Casa Real justifican ese desplante del rey al asegurar que don “Juan Carlos es el encargado de conducir este tipo de actos, que siguen un programa similar, y en los que, además, es tradición que el monarca dirija unas palabras de ánimo a los becados. Por ello, puede interrumpir y alargar el acto cuando quiera. La reina únicamente le recuerda que los músicos están esperando”, señalan en conversación con Vanitatis, restándole importancia al suceso al tiempo que recuerdan un suceso similar: la entrega de los Premios Internacionales Rey Juan Carlos, en los que el monarca clausuró el acto sin que el Orfeón Pamplonés hubiera iniciado su actuación sorpresa.