Por Carlos de San Juan
Parece que el merenguero Toño Rosario no coge cabeza, cuando decide seguir lanzando merengues sin sentido a la radio.
Desde que comenzó a grabar en vivo temas intrascendentes, carentes de lirica, sus bonos cayeron de forma estrepitosa.
Al salir Israel Casado y el maestro Heredia, de su orquesta, quienes le crearon una línea romántica, pero sin dejar de lado lo bailable, este dio un giro a la musica que lo catapulto a la fama, creando temas en vivo, tan malos, que le alejaron seguidores.
Desde el Kulikitaka para acá, jamás ha vuelto a dar en la diana del éxito, ya que todo lo que ha salido musicalmente, han sido puros disparates.
Para contratar a Toño Rosario había que tener una buena suma de dinero contante y sonante, por lo caro que era, ahora su valor en el mercado apenas llega a los 150 mil pesos.
Las últimas fiestas por el Cibao no han dejado nada de beneficios a sus contratantes, debido a que el público no apoya a este merenguero, como en años anteriores.
Hay que recordar que este artista es poseedor de un dominio escénico increíble, pero el desvió de de su línea musical, le alejo seguidores.
Ojala vuelva a sus raíces musicales, para que vuelva a ocupar el sitial que antes tenía.
