Un entorno lleno de verdor, unos 90,000 metros de plantaciones, compuestos de 21,724 plantas, le han devuelto “el respiro” que tanto anhelaban los residentes de La Vieja Barquita. Allí el aire limpio y fresco, el contacto con la flora, y las vivencias que comparten sus moradores, les ha permitido conocer, cuidar y respetar más la naturaleza.
Lejos de la contaminación que en años anteriores había hecho de esta barriada un lugar poco saludable; la siembra de distintas especies de plantas entre ellas herbáceas, acuáticas, arbustos y árboles, ha proporcionado mejoras físicas y ambientales a esta demarcación.
Según el biólogo Ricardo García, director Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Moscoso, este proyecto permite la conservación endémica dominicana, ya que en este espacio hay un gran número de especies que están en peligro de extinción.
De igual manera, puntualizó García que este proyecto mejora los servicios y la calidad ambiental de esa área, reduciendo la contaminación de algunas plantas que debido a su composición orgánica sirven de filtros y de “trampas” para los contaminantes.
“La gente va a tener un espacio para ir a disfrutar, interactuar con la naturaleza, es decir, que las familias que viven ahí podrán hacer picnic en ese espacio habilitado para esos fines, también se va a educar y controlar el vertido de los desechos sólidos”, expresó García.
Asimismo, dijo que estas plantas dan paso al esparcimiento de sus habitantes y el paisajismo del entorno, creando de esta manera un lugar de ocio y tranquilidad para que los mismos puedan crear vivencias en familia.
Cachón de la Rubia
Conectando con el parque el Cachón de la Rubia, en las márgenes de los ríos Ozama e Isabela; unas 6,337 plantas herbáceas/acuáticas, entre ellas: paragüita, papiro, helecho de pozo o culantrillo de pozo, platanito, enea o totora, reverdecen todo el perímetro cercano a las viviendas y casuchas que se encuentran en ese entorno.
“Vamos a adecuar la palma real, en algunos espacios, la ceiba también, están sembradas algunas de gran tamaño, y otros árboles que estaban allí y lo que estamos haciendo es acondicionando, mejorar su entorno para un crecimiento más estético”, recalcó García.
Entre los arbustos y árboles se han plantado 15,387 de diferentes especies, entre ellas: anacahuita, campeche, cabirma guinea, uva de playa, entre otros.
Jornadas de Limpieza
Se han realizado doce jornadas de recogida de veinte toneladas de desechos sólidos, principalmente fundas y botellas plásticas, con el apoyo de diferentes instituciones.
La problemática con el tema de los desechos es que, a pesar de que se hace limpieza permanente cada vez que llueve, a través de las cañadas, se siguen vertiendo desechos en el lugar, sobre todo en períodos de lluvias.
Sensibilización
En la primera etapa de sensibilización en 22 jornadas, 1,324 estudiantes y profesores, fueron orientados en el tema de la problemática de los desechos sólidos en la comunidad, uso racional del agua, aguas residuales o servidas, sensibilización ambiental, educación ambiental y nuevos cuidados en el Proyecto La Barquita y cultura de las 3R, en nueve de las doce escuelas pertenecientes al Distrito Escolar 10-03 de Santo Domingo Este.
El propósito era sembrar la semilla del cambio en torno a estos temas ambientales.
Tanto comunitarios, directores de escuelas, juntas de vecinos, representantes de instituciones cercanas a las comunidades, con la finalidad de difundir la importancia del Proyecto Parque Fluvial La Barquita (PPFB), los elementos necesarios para su cuidado y hacer partícipe a los actores de las bondades del parque, participaron en actividades de sensibilización.
La Unidad para la Readecuación de La Barquita y Entorno (URBE) además, se propone concienciar a moradores de las cinco barriadas aledañas al proyecto como lo son: Katanga, Vietnam, Puerto Rico, Las Frutas y Moisés, con el objetivo de realizar diálogo, donde se le explique la importancia de este proyecto para la zona.
Las aguas negras
Según el encargado de planificación del Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Moscoso, Luis Carrasco, se ha canalizado el trayecto de las aguas residuales, por medio de un palustre, y donde se han sembrado distintas plantas que sirven de filtro y permiten purificar el agua.
Proyecto
URBE, en conjunto con Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Moscoso, llevaron a cabo del proyecto PPFB.
En septiembre de 2016 se iniciaron los trabajos de acondicionamiento del área, para en un año y nueve meses, tiempo estimado que se anunció, La Barquita se convierta en un parque con 53,000 plantas sembradas, en un espacio de 100,000 metros cuadrados.
El proyecto lleva un 85% de la meta, ya que obras físicas y de ingeniería aún no están finalizadas, por ello, como lo especifica el director del Jardín Botánico, se está fortaleciendo la etapa de la ornamentación del área.
La plantación es la acción de sembrar y así también se le llama al conjunto de todo lo plantado. Es un sistema agrario latifundista desarrollado principalmente en la zona intertropical.
Para hacer plantaciones en buen estado es necesario el conocimiento profundo de temas de la naturaleza del suelo y el estado del subsuelo y, sobre todo, las exigencias ecológicas del propio cultivo.
LABOR COMUNITARIA
José Pérez vive en La Vieja Barquita desde hace doce años y con 66 años hace una labor comunitaria para mantener cuidada y ordenada esta zona. Procura que este espacio de vegetación cuente con una óptima organización y no exista ningún tipo de desperdicios.
Desde tempranas horas de la mañana hace su rutina que consiste en desyerbar las “malas yerbas” que crecen al paso de las plantas seleccionadas, y en ocasiones las riega. Afirma que siempre ha sido amante de la naturaleza y espera poder realizar actividad “mientras vida tenga”. “A mí me gusta venir aquí porque me distraigo y me siento más útil”, enfatiza emocionado Pérez. Él, en conjunto con otros quince moradores del sector, hacen labores comunitarias que varían desde trabajos en este nuevo proyecto hasta la ayuda en la recogida de basura.
Cultivos
A través de un fertilizante o abono es cualquier tipo de sustancia orgánica o inorgánica que contiene nutrientes en formas asimilables por las plantas, se incrementa el contenido de estos elementos en el suelo, al igual que la mejora de la calidad del sustrato a nivel nutricional, estimulándose de esta manera el crecimiento vegetativo de las plantas.