El proyecto cuenta con Michael De Luca y Brett Ratner como productores y la debutante Elyse Hollander como guionista. El libreto de Hollander ocupó en 2016 el número uno en la denominada Black List, la lista de Hollywood que sigue la pista a los guiones más atractivos aún sin adaptar.
La historia se centrará en la juventud de Madonna,
en concreto a comienzos de la década de 1980, cuando la artista comenzó a
trabajar en su primer álbum de estudio y empezó a descubrir las
dificultades que afrontan las mujeres en ese negocio, al mismo tiempo
que disfrutaba de su floreciente vida amorosa y de sus primeros
coqueteos con la fama.
Madonna se trasladó desde Michigan a Nueva York en 1978 buscando un
futuro dentro del mundo de la danza y el baile, aunque pronto descubrió
su amor por cantar y componer canciones. Probó en una banda de rock y
pasó poco después al dance y al pop, los pilares en los que se basaría
su primer álbum, lanzado en 1983 con sencillos como Holiday, Borderline o Lucky Star.
Hollander trabajó previamente como asistente del cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu durante el rodaje de Birdman.