Esta
incautación pone de manifiesto cómo están los niveles de colaboración y
asistencia entre las fuerzas de interdicción en RD, asistidas por otras
agencias de EEUU, comentó el jefe antidrogas, mayor general Rosado Mateo
SANTO DOMINGO.- El millonario cargamento
de cocaína ocupado ayer tarde por las autoridades en una playa de la Bahía de
Ocoa, en Azua, es de 1,589 que fueron paquetes transportados desde Sudamérica -al
parecer de Colombia o Venezuela- en una lancha dotada de tres potentes motores
fuera de borda tripulada por cuatro hombres, narcótico que provisionalmente
pesó 1,870 kilogramos, informó este jueves la Dirección Nacional de Control de
Drogas (DNCD).
La voluminosa carga estaba distribuida
en 76 sacos de polipropileno a bordo de una lancha de 40 pies de eslora,
impulsada por tres motores con capacidad de 200 caballos de fuerza cada uno, embarcación
en la que también fueron hallados también 11 tanques de gasolina de 55 galones
por unidad, además de chalecos salvavidas, cargadores para fusiles AK-47 y M-16,
teléfonos satelitales y GPS, entre otros instrumentos de navegación.
Aunque los citados tipos de armas de
guerra no fueron ocupados, las autoridades suponen que los ocupantes de la
lancha lo pudieron haber lanzado al mar antes de escapar. La operación fue
dirigida personalmente por el mayor general Rolando Rosado Mateo, presidente de
la DNCD, y el Director de Centro de Información y Coordinación Conjuntas
(CICC), general Valentín Rosado Vicioso.
La embarcación fue interceptada en la
Bahía de Ocoa y obligada a navegar hasta “Playa Mía”, en la Sección Hatillo,
jurisdicción de Las Charcas. La droga fue presentada en conferencia de prensa en
la sede de la DNCD por los jefes de esa institución, de la Marina, de la Fuerza
Aérea Dominicana (FAD) y de la Policía mayores generales Rosado Mateo, Edwin Dominici
Rosario, Ramón Hernández y José Armando Polanco Gómez.
Los tripulantes de la embarcación
lograron escapar por la zona boscosa próxima a la playa donde fue ocupada la
droga, pero la DNCD garantizó que serán arrestados. Todos fueron vistos desde
el aire cuando escapaban, “pero nos abstuvimos de dispararle, aunque les fueron
hechos algunos disparos de advertencia”, de acuerdo al mayor general Rosado
Mateo, quien junto a Rosado Vicioso estaban a bordo de un helicóptero.
Además de la lancha con la droga, las
autoridades interceptaron otra lancha en la zona de Punta Salina -una hora más
tarde- y se presume que la misma sería empleada para el trasbordo de la droga,
a unas 15 millas de la costa. Esa embarcación está también en manos de las
autoridades, como parte de la investigación parta determinar si los
propietarios de la misma tienen que ver con esta frustrada operación de
narcotráfico.
La carga de cocaína, presentada esta
mañana en la sede de la DNCD, fue llevada al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para ser
analizada y luego proceder a incinerarla, probablemente el jueves de la semana
próxima, responsabilidad que recae ahora sobre la Procuraduría General de la
República.
La operación
El decomiso de la droga fue posible
gracias al trabajo combinado que mantiene la Fuerza de Tarea Conjunta de las
Fuerzas Armadas, integrada por las tres instituciones castrenses. Fueron
empleadas dos lanchas de la marina, dos aviones Super Tucanos, un helicóptero
de la DNCD, así como por unidades especiales en tierra integradas por la Unidad
de Reacción Táctica (URT), de la agencia antidrogas y miembros de la Policía
Nacional.
Jugó también un papel determinante el
Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos, institución sirvió de soporte
con un avión empleado en el patrullaje
ordinario que realiza esa agencia en la zona del Caribe. “Fue un trabajo
combinado, como se viene haciendo desde hace tiempo, y el mismo es parte de esa
unidad de acero que mantienen nuestras fuerzas en la lucha contra esta
actividad criminal”, dijo Rosado Mateo.