Austria obligará a confinarse a millones de personas que no están completamente vacunadas contra el coronavirus a partir de este lunes para lidiar con el aumento en las infecciones hasta niveles récord, dijo este domingo su canciller federal Alexander Schallenberg.
La norma será adoptada esta noche por el Parlamento austríaco para un período inicial de diez días (hasta el 24 de noviembre), con la opción de ser luego extendida, lo que requerirá una nueva votación parlamentaria. La Policía austríaca controlará la norma de forma aleatoria, con multas por incumplimiento de hasta 500 euros para los particulares y de hasta 3.600 euros para establecimientos que no cumplen las normas.
"Debemos aumentar la tasa de vacunación. Es vergonzosamente baja", dijo Schallenberg en una conferencia de prensa en la que anunció la nueva medida después de una videollamada con los gobernadores de las nueve provincias de Austria.