Castro la incluye en el auto de apertura de juicio oral como presunta cooperadora de dos delitos cometidos por Urdangarin. La Fiscalía pide más de 19 años para él, acusado de desvío de fondos y fraude fiscal.
La infanta Cristina será juzgada por la Audiencia de Palma como presunta cooperadora en dos delitos fiscales cometidos por su marido, Iñaki Urdangarin,
después de que el juez instructor del caso Nóos, José Castro, la haya
incluido como acusada en el auto de apertura de juicio oral que ha
dictado hoy.
Habrían defraudado hasta 337.138 euros a Hacienda a través
de Aizoon, empresa presuntamente pantalla de la que ambos son
propietarios. Además, le exige el pago de 2,6 millones de euros en
concepto de responsabilidades civiles. La infanta ya había depositado
los casi 600.000 euros reclamados por el fiscal para tratar de evitar el
ingreso en prisión.
De esta forma, el juez ha resuelto no aplicar
sobre la Duquesa de Palma la denominada doctrina Botín, que impide
juzgar a alguien si únicamente le acusa quien ejerce la acción popular,
en este caso Manos Limpias, que solicita ocho años de cárcel para la
hermana del Rey Felipe VI. Por su parte, ni la Fiscalía Anticorrupción
ni el perjudicado por los delitos presuntamente cometidos, la Agencia
Tributaria, apuntan a la existencia de indicios criminales sobre
Cristina de Borbón.