Henry Santos, ex de Aventura, Franklyn Romero y Nelson Record |
Nueva York.- El Tette Club de Franklyn Romero se ha convertido en uno de
los establecimientos de mayor atractivo en la ciudad de Nueva York.
El club se llena en las noches de un público alegre y
entusiasta que disfruta de los variados atractivos que ofrece esta sala.
Aparte de las atracciones musicales, el establecimiento
mantiene un nivel de animación permanente con unas bailarinas distribuidas por
las diferentes áreas del local que
bailan desde plataformas dispuestas
para tales fines, y que nos recuerdan las del viejo Copacabana.
El concepto va por esa línea, naturalmente con chicas muy
atractivas, que reciben propina en sus bikinis, aunque con ello emulan en cierto modo, "a
discreción" a las de los bares de tablas o a las que bailan "en el tubo",
guardando, claro está, la distancia "pecaminosa" que separa a uno y a otro.
Lo
cierto es que constituyen un gran atractivo, permitiendo un disfrute
posible del ambiente, sin comprometer la presencia ni la imagen, como
ocurre en los establecimientos de las "muñecas", "dolls", y "girls
dancers" "tablerinas" que como se sabe tienen otra connotación en el
negocio.
Llama
la atención es la cantidad de féminas que
acuden al lugar, en una proporción que duplica a los hombres. Franklyn
Romero juega con ello una carta al éxito, pues sabe que donde van las
mujeres también van los hombres.
Todos
los servicios de bebidas "premiun" son adornados con varillas de fuegos
artificiales que a cada momento iluminan y llaman la atención en el
ambiente, evidenciando que la gente que allí acude es de buen y caro
consumo.
Diferente
a los clubes de la "jevitada", donde los muchachos se pasan la noche
con una botellita de agua o una cerveza caliente en la mano, tratando de
que nunca se agote. ¡Eso si, dando más "muela" que un cangrejo!
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