Las variedades de sargazo que llegan a las costas del país tienen concentraciones de arsénico que superan los límites establecidos a nivel internacional para ser utilizados en labores agrícolas y de alimentación de animales. Así lo revela un estudio realizado por investigadores del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) quienes analizaron la concentración de metales pesados en el alga.
La investigación, publicada en el journal científico Marine Pollution Bulletin, consistió en la recolección de muestras de las tres variedades de algas que llegan a las costas del país en ocho playas, con el objetivo de analizar la presencia de metales pesados en su composición para determinar la posibilidad de su uso en la agricultura.