El 2018 augura importantes cambios en materia de transporte para el país. La automatización del sector, la incorporación del Teleférico y la puesta en operación de la línea 2B del Metro que comunicará a Santo Domingo Este y el Distrito Nacional son parte de los avances.
El blanco es transformar un sistema de transporte considerado por muchos como obsoleto, inseguro e incómodo y a la vez sacar a República Dominicana de la lista de los países con más muertes por accidentes de tránsito de la región. En este reto, el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) juega un rol fundamental.
Como órgano regulador del sector, el organismo se encuentra elaborando los reglamentos que establece la ley 63-17 sobre Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial. En su función de ente planificador, trabaja en el Plan Estratégico de Seguridad Vial y según reveló a elCaribe su directora Claudia Franchesca de los Santos, el Intrant está en conversaciones con los operadores para sustituir el servicio de concho que se brinda en los corredores principales del Gran Santo Domingo (GSD) por un transporte colectivo que se realice mediante autobuses.
“Hemos estado hablando con todos los empresarios del sector transporte dándoles la noticia de cómo sería este proceso. Lo que se busca es que en los corredores principales el transporte sea colectivo; que haya autobuses en las vías principales, no carro de concho, ni minibuses”, informó.
La funcionaria dijo además que los vehículos de menor capacidad que saldrán de importantes avenidas de la zona metropolitana estarán en el sistema transitando en las rutas que alimentan a los nueve principales corredores que cubren vías como la 27 de Febrero, Máximo Gómez, Isabel Aguiar, Luperón, John F. Kennedy, Charles de Gaulle, Sabana Larga, San Vicente de Paúl y Las Américas.
Asegura que para lograr la efectividad del transporte de pasajeros es necesario que el servicio sea brindado de forma colectiva, como ejemplo citó el Metro, el Teleférico y la OMSA.“Lo nuevo que hay es que ya es un transporte colectivo, de guaguas, en estos corredores principales; lo que se plantea es que ya no haya vehículos de concho, sí seguirán existiendo los taxis para las personas que los quieran utilizar, pero el transporte de pasajeros pasa a ser colectivo como en la mayoría de los países de Latinoamérica y otros países del mundo”, expuso.
“Identificamos primero los corredores principales, que es donde se mueven la mayor cantidad de pasajeros en el Gran Santo Domingo (GSD), donde estamos comenzando, y luego se van a ir adicionando los corredores transversales que alimentan a los principales”, agregó.
Ante la pregunta ¿el Intrant se encargará de la adquisición y distribución de los autobuses requeridos? Contestó que la mayoría de las rutas de los corredores están bajo contratos de operación a cargo de los operadores del sector privado.
“Con ellos se están haciendo las evaluaciones y levantamientos de quiénes son y cuántos vehículos están en cada corredor y con ellos estaremos haciendo la conversión a corredores que manejen un transporte colectivo. Ellos son los que van a hacer las inversiones de las unidades que van adquirir” puntualizó.
Indicó que el Estado establecerá las especificaciones técnicas de los vehículos que se necesitan en los corredores a intervenir, que deberán contar con la tecnología que permita dar seguimiento a las frecuencias y el control de los turnos de trabajo. Aunque no especificó la fecha en que estará listo el primer corredor con transporte colectivo, dijo que todo dependerá del proceso de negociación que se lleva a cabo con los empresarios del transporte.
¿Qué piensan los operadores?
Pero esta decisión no goza de la aprobación completa de todos los operadores del transporte público de pasajeros como se les llama en la nueva ley a los sindicalistas del sector.
Para Antonio Marte, presidente de la Central Nacional de Organizaciones de Transporte (Conatra), la idea de sacar los carros de concho de los principales corredores es un sueño del Intrant, que ve muy lejos de cumplirse. “El Intrant lo que está soñando profundo, pero no despierta. Está dando palos a ciegas”, opinó previo a asegurar que la propuesta de sustituir el concho por un transporte colectivo y la de construir cuatro grandes terminales de transporte interurbano no ha sido discutida con la organización que dirige. “Que lo hagan y que terminen de sacar a los choferes, porque ya el Metro acabó con los choferes de Villa Mella, que sigan sacándolos que tendrán más delincuentes en la República Dominicana”, advirtió. Asimismo, criticó que a seis meses de entrar en operación, el Intrant aún no ha concluido los reglamentos elementales para lograr la organización y modernización del sistema de transporte.
Mientras, Reinaldo Pérez, secretario de la Unión Nacional de Transportistas y Afines (Unatrafin), considera la iniciativa de eliminar el concho en los corredores principales como una propuesta poco sincera. A diferencia de Marte, el dirigente choferil asegura que ha participado en encuentros con la directora del Intrant donde se ha socializado el planteamiento. “Hemos estado de acuerdo con lo planteado, pero en momentos hemos entendido que no son propuestas tan sinceras, dado que no podemos sacar a nuestros choferes que han estado dando un servicio público con costo privado”, enfatizó.
Pérez propone una justa indemnización para aquellos conductores de transporte público que vayan a ser afectados con los planes de modernización del Intrant. “Yo tengo fe de que mi país debe adecentarse de acuerdo a los nuevos tiempos y tiene que ir copiando de las transformaciones de otros países. Sin embargo, me preocupa nuestra clase que tantas décadas ha brindado un servicio de transporte”, expresó.
Otro transportista que no está de acuerdo con la medida a implementar por parte del Intrant es Juan Hubieres, presidente de la Federación Nacional de Transporte La Nueva Opción (Fenatrano) quien de forma irónica solo dijo: “Harían bien en poner en la calle a más de 80 mil empleados para que pasen a vivir como hoy viven los cañeros”.
Sindicatos recomiendan indemnizar
En tanto, Wiliam Pérez Figuereo, de la Central Nacional de Transportistas Unificados, (CNTU), opinó que la implementación de un transporte colectivo se enmarca dentro de las transformaciones del sector. Sin embargo, advirtió que cientos de choferes serán perjudicados con las medidas. “Creo que el Gobierno dominicano, a través del Intrant, debe sentarse con las organizaciones a buscar una salida. A esa gente (Choferes) pudiéramos emplearlos para no tirarlos a las calles”, sugirió. El presidente del Movimiento Choferil de Transporte (Mochotran), Alfredo Pulinario (Cambita), también manifestó temor de que el plan de colectivizar el transporte afecte a cientos de choferes. Abogó por una compensación económica para aquellos conductores que por condiciones expuestas en la ley, entre ellas la edad, ya no puedan seguir ofreciendo sus servicios. “No nos oponemos a que el transporte se colectivice, como en todas partes del mundo, pero dentro de ese desarrollo, el Gobierno tiene que hacer algo por esos choferes que tienen 25 y 30 años operando en la ruta del transporte”, sostuvo.
Omsa viene con tarjeta de pago y carril exclusivo
Instituciones como la Omsa, también tienen un plan a efectuar este año. De acuerdo con su director, Héctor Mojica, la entidad se centrará en automatizar el cobro en los autobuses a través de tarjetas electrónicas, rescatar el corredor exclusivo de sus unidades y la colocación de Wi-Fi en toda la flota.
La institución realiza estudios para en este 2018 ampliar el corredor Charles de Gaulle y dar apertura a tres nuevos corredores en el Gran Santo Domingo. El funcionario explicó que sin modificar el presupuesto con el que cuenta, la entidad trabajará en mejorar la calidad en el salario de los choferes, cajeros y todo el personal de mantenimiento y mecánicos, basado en la eficiencia. Informó que en los últimos días, todas las rutas están siendo reforzadas con unidades que estaban detenidas por desperfectos técnicos y que se sigue trabajando hasta fines de semana para recuperar los autobuses dañados, con recursos económicos y humanos propios. También se está ponderando la posible licitación para compra de autobuses al final de este año, pero la prioridad del corto plazo es seguir reparando los que están dañados. “Este año ya estamos gestionando la instalación de un centro de monitoreo, a través de ese centro tendremos el control de todas las rutas y unidades, además de una serie de innovaciones que ya existen en todas partes del mundo y permite el seguimiento a todas las unidades como el control de movimiento interno dentro del vehículo, cámaras, botón de pánico, el estricto seguimiento de rutas por cada una de las unidades, la aceleración, frenado brusco, todo eso ya existe en el mundo”, agregó. (EL CARIBE )
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