Hace 60 años, una perra callejera soviética llamada Laika fue enviada al espacio, un viaje sin regreso que representó un gran avance para la humanidad.
El lanzamiento al espacio de la perra soviética Laika, que se llevó a cabo hace exactamente 60 años (3 de noviembre de 1957), convirtió a esta can en el primer ser vivo en orbitar el planeta Tierra. Tras haberse encariñado con la criatura, los científicos tuvieron que embarcarla en un viaje sin regreso por el bien de la humanidad.
Laika fue introducida en una cápsula de las dimensiones de un lavarropas, dotada de agua y comida. La perra murió durante el viaje, se calcula que entre 5 y 7 horas luego del lanzamiento. Falleció debido al estrés y la elevada temperatura, aunque según las predicciones debía permanecer con vida al menos una semana.
Pese al hecho de que la perra no consiguiera salir con vida, el experimento pudo comprobar que un ser vivo era capaz de sobrevivir al lanzamiento orbital y a la falta de gravedad. Tras esta prueba, los primeros animales que lograron retornar con vida de esta clase de viajes fueron las perras Belka y Strelka.
“El retrato de Laika fue publicado en las primeras planas de los principales periódicos de todo el mundo”, narró a la cadena rusa RT la coautora del libro ‘Perros Espaciales Soviéticos’ Olesia Túrkina, recordando además que “Innumerables tarjetas postales fueron producidas, la marca de cigarrillos ‘Laika’, cajas de fósforos, cajas de dulces, sellos, alfileres, calendarios, todos con el retrato de Laika”.
“En la URSS, para conmemorar su heroica muerte y glorificar su sacrificio involuntario por el bien de la humanidad, Laika fue convertida en una heroína de los cuentos infantiles dedicados a los ‘Perros Espaciales Soviéticos'”, agregó Túrkina.
¿Por qué escogieron a Laika y por qué un can?
Todos los perros escogidos para volar al espacio (36 en total) eran callejeros al igual que Laika. Fue precisamente esta condición, junto con su calmado carácter, su pequeño tamaño, la facilidad de entrenamiento y su agradable aspecto, lo que le significó ser la candidata idónea para el desalentador viaje.
Pero, ¿por qué razón seleccionaron perros para las misiones espaciales y no otras especies, como por ejemplo los chimpancés? Una de las científicas que colaboró en la misión de Laika, Adilia Kotóvskaya, argumentó que existían tres sencillas razones.
“En primer lugar, los perros callejeros eran perfectos para la misión. Tuvieron una vida bastante dura. Significa que estaban acostumbrados a diversas condiciones ambientales. En segundo lugar, los perros nos aman. Los humanos somos sus dueños, ellos son entrenados fácilmente. En tercer lugar, la fisiología de los canes ha sido ampliamente estudiada desde los tiempos de Iván Pávlov”.
En ese entonces, Laika tenía 2 años. Faltaba poco más de 3 años para la histórica misión de Yuri Gagarin, el primer ser humano en viajar al espacio exterior.