Por Agustín de la Cruz (Sugar).
New York (Soylatino.net), -Es común recibir o encontrar una serie de artículos elaborados con la finalidad de exaltar las cualidades, pegada, éxito, popularidad, entre otras incidencias, de un artista y/o una gira en Estados Unidos.
Lo cierto es que dichas notas
constituyen un argumento legitimo, lo que no es ético es utilizar
cualquier calificativo que no vaya acorde con la realidad de lo que está
ocurriendo con el artista en playas extranjeras.
Sobre todo que a simple vista
esas notas de prensa carecen de credibilidad, donde se refieren a una
supuesta popularidad de artistas que en muchos de los casos nadie conoce
ni suenan por ningún lado, o de artista con trayectoria que hace tiempo
perdieron el GPS de su carrera.
Lo peor del caso, es que con
apenas leer el título, dejan ver el refajo, convirtiendo en pinocho, a
quien la firma, al artista y a los medios que se hacen eco de tal
barrabasada.
Basta de tratar de engañar a los
demás, nadie puede venir con trucos, a sabiendas que contamos con la
magia de la tecnología y que lo que ocurre allá o aquí, gracias al
Internet rápidamente se convierte en noticia olvidada.
Los superlativos son buenos y
validos, siempre y cuando, sean sustentados con pruebas reales, ya basta
de escribir y enviar notas sin fundamentos, para su pronta y/o oportuna
difusión.