Postrado
en una cama, sin dinero suficiente para sus gastos clínicos, sin apoyo
familiar, con dolores insoportables y con supuestas deudas al fisco, Andrés
García cuenta a BASTA! que de no solucionar su situación económica, para poder
volver a caminar puede tardar hasta un año.
“Estoy y
estaré en cama hasta que no resuelva el poder pagar para el periodo total de
rehabilitación que necesito. Clínicamente puedo caminar en seis meses y la
falta de recurso económico lo puede retrasar hasta un año”.
Deportista
de toda la vida, Andrés vive hoy en un permanente estado de dolor. “Los dolores
que empiezo a sentir son insoportables, la gente que me cuida hace su mejor
esfuerzo, pero siempre estoy de mal humor porque sentir lo que siento es demasiado
doloroso. Mi familia puede mostrar interés, pero no están conmigo
permanentemente. Aunque puedan visitarme, no están y la ayuda económica que
pueden brindar es insuficiente”, dice Andrés.
Asegura
que no hay ahorros que aguanten cuando se padece una enfermedad grave. “Tengo
muchas propiedades y algunas están intervenidas por Hacienda, porque el terreno
en el que está construida una está en un predio libre de impuestos y Hacienda
insiste en que sí tiene que pagar derechos y no me va a ser posible venderla,
aunque sería de gran ayuda para pagar el tratamiento clínico”.
Tradicionalmente
fuerte y altivo, hoy vemos a un Andrés humilde. “Claro que me siento triste,
cabrón, pues aunque es mi culpa el estado en el que me encuentro, no es fácil
pensar que tus bienes y ahorros serán insuficientes para seguir obteniendo la
ayuda que requiere mi organismo”, concluye.
.jpeg)
