La actriz y ex conejita de Playboy confesó que nunca se consideró una "belleza clásica" y prometió que a partir de ahora no se someterá más a cirugías estéticas y dejará que la naturaleza siga su curso
"No estoy en contra de la cirugía plástica, lo que me he hecho hasta ahora se quedará conmigo, pero no quiero nada más. Voy a hacerme tratamientos faciales, pero no quiero volver al camino de los cuchillos", manifestó la modelo en declaraciones que reproduce El Mundo.
Pamela, quien tiene dos hijos con su ex marido, la estrella de rock Tommy Lee, no sólo está feliz con su apariencia, sino que tampoco tiene ningún problema en que la gente la considere una "rubia tonta".
"Me gusta que la gente se sorprenda de que puedo formar una frase completa. No tengo nada que demostrar”, declaró la ex protagonista de Baywatch.
"He tenido relaciones y las cosas han ido mal porque tengo una personalidad salvaje, de espíritu libre. Ahora me encanta quedarme en casa con mis hijos", concluyó.
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