La recesión económica en combinación con la inflación más alta en 27 años que disparó los precios de los alimentos básicos sumió a más argentinos en la pobreza durante la segunda mitad de 2018.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) reportó el jueves que en el segundo semestre del último año la pobreza afectaba al 32% de los argentinos contra 27,3% del primer semestre.
Argentina padeció en 2018 una devaluación del 51% de su moneda, que en una economía fuertemente atada al dólar se trasladó de inmediato a los precios, con fuerte impacto en los alimentos.
La inflación el año pasado fue de 47,6%, la más alta desde 1991.A su vez, la actividad económica cayó 2,6% en 2018, lo cual repercutió en una menor generación de empleo. La tasa de desocupación fue de 9,1% en el cuatro trimestre del año pasado.
La medición oficial se realiza tomando como referencia la capacidad de ingresos de una familia tipo de cuatro integrantes para procurarse una canasta de alimentos capaz de satisfacer un umbral mínimo de necesidades energéticas y proteicas.