Fue un discurso reflexivo, conciliador y unificador que enumeró los
aspectos básicos de una agenda de urgencias y compromisos a mediano y
largo plazo que requieren del concurso de la iniciativa privada como son
los sectores electricidad y transporte.
Hizo bien el mandatario al abstenerse de enumerar los logros o realizaciones que pueda atribuir a su gestión, en el entendido de que sus palabras fueron dirigidas a un auditorio enterado de todas las fortalezas y debilidades del sector público y de la sociedad en su conjunto.
Se resalta que la propuesta presidencial de alianza estratégica entre
Gobierno y sector privado estaría sustentada en la transparencia y
seguridad jurídica para la inversión, lo que impactaría de manera
decisiva en sectores fundamentales como la industria eléctrica y el
transporte de pasajeros y carga.
El Presidente ha pedido al capital privado nativo y extranjero
participar en el proyecto de construcción de la central generadora de
Punta Catalina, con lo cual el Gobierno demostraría que su interés es
propiciar la reducción del costo de la generación y no aumentar su
participación en las empresas eléctricas.
Otro efectivo canal de cooperación público-privado sería la incursión
de empresas privadas en el desarrollo de un sistema óptimo de
transporte público, que incluiría nuevas líneas del Metro, autobuses
articulados de tránsito rápido, tranvías y nuevas flotillas de buses.
Con su declaratoria de respeto a la separación de los poderes
públicos, el Presidente envía a la sociedad señal clara de que respeta
la Constitución de la República, aunque expresa preocupación por los
escándalos que agobian al Poder Judicial y exhorta a todos los sectores a
involucrarse en los programas oficiales de prevención contra la
corrupción.
Por su contenido reflexivo, por su compromiso de respeto y promoción
de la transparencia e institucionalidad y por su propuesta de alianza
del Gobierno con el sector privado para impulsar una agenda de
desarrollo y bienestar, puede decirse que el discurso del presidente
Medina fue positivo y consolador.