Catherine Zeta-Jones, actriz, es bipolar y busca
ayuda en un centro de salud mental, reconoce su estado y por voluntad
propia recurre al mismo.
Hace poco nosotros tuvimos la valentía de decir que una reconocida
cantante padecía de bipolaridad y su comportamiento discolo. Me cayeron
encima muchos y el tiempo demostró nuestra certeza. Me llamaron algunos
psiquiatras y psicólogos y me pidieron explicación en qué me basaba.
Para nadie es ya un secreto la existencia de esta realidad y la
presencia, sobre todo en artistas jóvenes en nuestro país. Hoy viven en
dos mundos, piensan de una forma en la mañana y en la noche piensan de
otra, sin ninguna explicación. Manifiestan dos personalidades distintas.
He sido objeto de combate de uno que otro de estos. Dos años han
pasado de alguien tratando de hacer escándalos en base a mi persona, ni
su dinero, ni su payola pudieron, el pueblo la juzgó. Hasta su cuerpo y
su rostro lo trasformó como si fuera otra persona.
Hace poco en un programa de televisión se me acusó de depredar en el
mundo artístico, sinembargo en otros programas hablaba reconociendo la
labor de la creación conjunta del grupo que él dirige. No es la primera
vez que tiene manifestaciones díscolas en su vida personal. Este caso
llegó a las páginas de periódicos y a los sitios virtuales, cuando
acusaba de una forma poco seria a su ex mujer. Tambien hacia su padre, a
quien acusaba de borracho, luego se hizo adicto al WL. Todo el mundo
conoce el caso, no tengo que refrescarlo. Porque las gentes que padece
de eso se olvidan con mucha rapidez de las manifestaciones que
públicamente hacen en contra de otros.
He tenido la suerte de ser acogido en periódicos y páginas virtuales y
a través de mis artículos reposan los pensamientos de hace más de
cinco, seis años que no han variado y no tienen por qué variar, porque
en todos he dicho la verdad.
El ejemplo que presenta una artista de la calidad de Zeta Jones
merece ser imitado por todos nosotros. Ayer hablamos de una mujer y se
demostró lo planteado, hoy ponemos el ejemplo de un hombre que hace
mucho tiempo está demostrando su actividad mental.
He sido testigo de intentos de asesinatos de un cantante de mucho
nombre a su señora de entonces. Tuvimos que salir a las 12:00 de la
noche en varias oportunidades y ver ese espectaculo junto a sus hijos.
42 años en el arte popular, poco a poco los iré narrando.
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