El Ministerio Público afirma que en la región Sur del país existen clanes familiares dedicados al narcotráfico, una actividad delictiva que ahí se comete de generación en generación con "naturalidad".
En el proceso investigativo denominado Operación Caimán II, el órgano acusador, con el apoyo de autoridades narcóticas internacionales, ha identificado dos estructuras atomizadas y cuatro narcofamilias, entre las que destacan familiares del asesinado narcotraficante dominicano Rolando Florián Féliz.
Según el Ministerio Público, por sus nexos directos con los líderes de carteles colombianos como los de Medellín, de Cali y Norte del Valle, Florián Féliz fue considerado como el narcotraficante dominicano más temido, apodado "El rey de Najayo". Se inició en el mundo del narcotráfico como lanchero, posteriormente como coordinador logístico y finalmente se convirtió en el primer gran capo dominicano. Fue asesinado de siete disparos por un funcionario penitenciario el 16 de mayo de 2009 en la cárcel de Najayo, donde cumplía una condena de 20 años tras ser detenido con 953 kilos de cocaína en 1994.