Es una de las artistas más reconocidas a nivel mundial. Sin embargo, Jennifer López intenta que sus hijos se mantengan al margen de su popularidad. La cantante quiere que los mellizos Max y Emme tengan una infancia tranquila. Su deseo es que crezcan igual que el resto de niños de su edad. No quiere que tengan compromisos, que únicamente piensen en sus estudios y en sus actividades extraescolares.
Algo con lo que también está de acuerdo el padre de los pequeños, Marc Anthony. Aunque se separaron, se llevan muy bien y ambos van al unísono en cuanto a la educación de sus hijos se refiere. De hecho, tanto Jennifer como él han rechazado distintas ofertas de trabajo que les han llegado para sus hijos. Max y Emme, que tienen diez años, han sido reclamados por importantes canales infantiles como Disney y Nickelodeon para sumarse a su plantilla.
“Tener que estar lidiando con grabaciones, audiciones y llevar a los niños de un lado a otro, es lo que menos quiere Jennifer. Max y Emme son felices en su entorno. Además, tienen en la abuela materna el apoyo y amor incondicional que Jen no puede darles cuando viaja por motivos laborales“, asegura una persona que conoce mucho a toda la familia Lopez.
Además, en una reciente entrevista que la diva del Bronx ofreció al canal E!, ya habló de este tema. Así, comentó que si sus hijos quieren seguir los pasos de sus famosos papás, será únicamente decisión de ellos. No les influirán. Tanto Marc como ella los ayudarán y apoyarán en lo que quieran. Eso sí, ahora considera que son muy pequeños. Por tanto, es consciente de que son incapaces de tomar ciertas decisiones, y más cuando son de tal envergadura.