USA Today intenta combatir la caída de publicidad y de ejemplares acercándose a los nuevos intereses de los lectores y ofreciendo su material en dispositivos portatiles
El lector encuentra ahora muchos consejos sobre turismo, reseñas de aparatos electrónicos, reportajes sobre temas deportivos, asesoría financiera y recomendaciones sobre estilos de vida. A fines de enero se estrenó un nuevo diseño para la primera página. El resto del diario tendrá más infografías coloridas, que fueron su sello distintivo cuando salió a la venta en septiembre de 1982.
La edición impresa también incluye códigos de barras que pueden ser escaneados en aparatos portátiles para ver videos y otro contenido digital.
El periódico salió hace casi 30 años para atraer a los lectores jóvenes que se criaron viendo televisión y fue usado como modelo por muchos medios de todo el mundo.
El diario más vendido ahora es el Wall Street Journal, con una circulación de casi 2,1 millones de ejemplares y que tiene 450 mil suscriptores de su edición online, comparado con las 18.500 de USA Today, según las últimas cifras de Audit Bureau of Circulations, la firma que mide la circulación de los diarios.
El editor de USA Today, Dave Hunke, tiene tanta fe en las novedades que pronostica que este año aumentarán las ganancias y la circulación, que actualmente es de 1,8 millones de ejemplares. Sería la primera vez en cuatro años en que habría incrementos en ambas categorías. "La idea de que en el periodismo de hoy se pueden dar pasos graduales ya no funciona", comentó Hunke. "Hay que tener iniciativas grandes y correr riesgos".
La abundancia de contenido gratis en la web hizo que disminuyera la cantidad de lectores de medios impresos, en algunos casos a la mitad. Pero más grave todavía es la caída de la publicidad.
La red le da a las empresas más oportunidades de dirigir su mensaje específicamente a la audiencia que más les interesa y a menor costo. Los ingresos por publicidad, tradicionalmente el principal sostén de los medios impresos, se redujo más del 50% en los últimos cinco años. Y los esfuerzos de los medios impresos por captar más publicidad online no dieron buenos resultados.