Anthony Fauci, el epidemiólogo que lidera la estrategia contra el coronavirus en Estados Unidos, ha dicho este domingo en una entrevista a CNN que el país probablemente acabará registrando “millones de casos" y “entre 100.000 y 200.000 muertes”. Aun así, advirtió: “No quiero que se aferren a eso”, ya que la pandemia es “un objetivo tan móvil que es posible equivocarse fácilmente”.
Estados Unidos se ha situado a la cabeza de los países con más infectados por el brote, con más de 125.000 contagios -el 56% en Nueva York- y cerca de 2.200 fallecidos. El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, extendió las restricciones en el Estado hasta el 15 de abril. “Esto no va a mejorar pronto”, advirtió.
“Cada vez que llegan los modelos [de proyección], muestran el peor de los casos y el mejor de los casos. En general, la realidad está en algún punto intermedio. Nunca he visto un modelo de las enfermedades con las que he lidiado donde los peores [escenarios] de un caso realmente ocurriesen. Siempre se sobrepasaron”, aclaró Fauci, un científico que lleva décadas al frente de la unidad de enfermedades infecciosas de los NIH (Institutos Nacionales de la Salud, la mayor maquinaría mundial de investigación biomédica). El epidemiólogo proyectó un escenario sombrío en momentos en que el Gobierno estadounidense discute si conviene suavizar las medidas de distanciamiento en las zonas en las que la pandemia aún no ha golpeado con fuerza. "No podemos permitir que la cura sea peor que el problema”, ha dicho el mandatario en reiteradas ocasiones. También señaló como objetivo el 12 de abril para empezar a suavizar las restricciones, aunque luego aclaró que la fecha es una orientación y decidirá en base a los datos y la recomendación de los científicos.
Trump sostuvo por este sábado por la mañana que estaba sopesando ordenar una cuarentena obligatoria en Nueva York, New Jersey y Connecticut, donde el virus golpea con dureza. Más tarde, el mandatario tuiteó que el Centro de Prevención y Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) le hicieron ver que “no era necesario”. Por ahora, Estados Unidos no ha emitido órdenes que limitan los desplazamientos de manera obligada, sino recomendaciones. Uno de cada tres estadounidenses han recibido llamamientos para quedarse en casa, y hay colegios y negocios cerrados por todo el país para frenar los contagios, que continúan con su tendencia al alza. Este sábado las muertes aumentaron más del doble en dos días.
La doctora Deborah Birx, coordinadora de respuesta al coronavirus de la Casa Blanca, afirmó este domingo en la NBC que los territorios del país que han registrado pocos casos hasta ahora deben prepararse para lo que está por venir. “Ningún estado, ningún área metropolitana, se salvará”, aclaró en el programa Meet the Press. Por su parte, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, extendió las restricciones en el Estado hasta el 15 de abril. “Esto no va a mejorar pronto”, advirtió.
Las alertas se encienden, pero Trump, que tiene previsto a dar una conferencia de prensa esta tarde, ha lanzado al mediodía una batería de tuits contra el trabajo que están haciendo los medios en referencia a las “noticias falsas” que publican. “Los pobres medios quieren que todos caigamos. Pero eso NUNCA va a pasar”, escribió en uno de los seis tuits dedicados al tema, donde también se refirió a los altos índices de audiencia de sus comparecencias.