La Fiscalía de Barcelona ha prorrogado este jueves las diligencias de investigación abiertas a la cantante Shakira por un fraude a Hacienda entre 2011 y 2014, cuando presuntamente habría simulado residir en el paraíso fiscal de Bahamas con el fin de eludir el pago de impuestos, según han informado fuentes de la investigación.
La medida llega después de que la artista pagara más de 20 millones euros a Hacienda por la cantidad supuestamente defraudada en 2011, ya que residía en España y, por lo tanto, debía tributar en este país. La Agencia Tributaria sigue el curso de la denuncia contra la cantante colombiana por los años 2012, 2013 y 2014, en los que, según los cálculos de Hacienda, defraudó más de 10 millones de euros.
El área de Delitos Económicos de la Fiscalía de Barcelona ha pedido ahora a la Fiscalía General del Estado que se prorroguen las diligencias abiertas el pasado diciembre para seguir investigando a la cantante. Shakira defraudó más de 10 millones de euros a la Hacienda española en tres años, según explicaron a EL PAÍS fuentes de la investigación.
La cantante colombiana eludió el pago de esa suma entre 2012 y 2014, años en los que, según la Agencia Tributaria, debía abonar sus impuestos en España porque era residente. El ministerio público tenía previsto comunicar a mediados de junio si presentaba denuncia o querella contra Shakira por tres supuestos delitos contra la Hacienda Pública, pero ahora, tras la prórroga, tiene de plazo hasta mediados de diciembre para hacerlo.
La Fiscalía decidió abrir diligencias en 2017 a raíz de un informe remitido por la Agencia Tributaria que alertaba de un presunto fraude fiscal en el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) entre 2011 y 2014. Fuentes del ministerio público informaron en enero de la sospecha que la artista colombiana habría eludido el pago de impuestos a la Hacienda española, simulando que en los ejercicios investigados residió más de seis meses al año en determinados países considerados paraísos fiscales.
La ley establece que, si un ciudadano pasa al menos la mitad del año (más un día) viviendo en España, se le considera residente fiscal. Y tiene que tributar en concepto de IRPF por los ingresos que obtiene en todo el mundo al tipo máximo La cantidad defraudada, según la información remitida por la Agencia Tributaria, superaría los 120.000 euros anuales, cuota a partir de la cual la evasión de impuestos está considerada delito fiscal, castigado con penas de uno a cinco años de prisión.