La ola de repudios y rechazos a los dichos del empresario Donald Trump ha sumado a la candidata democráta Hillary Clinton.
La ex primera dama y favorita para
suceder a Barack Obama en la interna demócrata ha aprovechado la
polémica por las declaraciones racistas de Trump para pegarle por
elevación al Partido Republicano, en el que el magnate será candidato.
Durante una entrevista con la cadena
CNN, la candidata se mostró "muy decepcionada" con el neoyorquino: "Me
siento muy mal y muy decepcionada con él y con el Partido Republicano
por no responderle de inmediato y decirle 'Basta, para ya'", dijo desde
Iowa, donde se encuentra en campaña.