Por: José R. Martínez BurgosEl equilibrio en el Senado, en la Cámara de Diputados y en los Ayuntamientos, solo se obtendrá cuando se elabore, apruebe y se promulgue una ley de fugas que regule la permanencia en los partidos de los hombres y mujeres que resultan electos por el pueblo dentro de los partidos que sustentan las candidaturas de éstos. No puede continuar la existencia de tránsfugas en la Sociedad Dominicana.
Los Diputados, Senadores y Regidores que se escapan de sus partidos y se esconden en otros, son maniobras sucias y despreciables. Lo mejor para no traicionar las convicciones es no tenerlas y ese es precisamente el privilegio de los tránsfugas, son señores y señoras que desgraciadamente no comparten sus propias creencias.
Es verdad que todo puede cambiar y hasta volverse al revés, sin que nadie se asuste por ello, pero lo ético, es renunciar de un curul, cuando no se está de acuerdo con los postulados y principios del partido que llevó a esa persona en su boleta.
Un tránsfuga no da ese paso por principios, sino por la pasión que le despierta el oro corruptor, con ese acto lo que se hace es darle una patada a la democracia con métodos gansteriles.
El más significativo acto de transfuguismo fue el de la Cámara de Diputados y luego el de la Liga Municipal, donde se organizó una verdadera sociedad mafiosa, dedicada a la compra de Regidores y Diputados, con ofertas que suelen decir los comprados que no se pueden rechazar, es que estos señores y señoras, si es que se le puede dar ese tratamiento, corresponden y responden a una ambición política que deja de valer por si misma porque se rebaja al nivel de un valor instrumental al servicio de enriquecimiento ilícito personal que forman una especie de nudo de víboras.
Es urgente que la sociedad civil, elabore un proyecto de ley, que consagre que los cargos electivos sean propiedad de los partidos políticos y no de los candidatos a los mismos, con lo cual el transfuguismo desaparecería y nos evitaríamos sus sorpresas y se impondría en orden la figura democrática con verdadera libertad.
En los últimos años los más beneficiados con el transfuguismo han sido el PLD y el PRD, y por eso han hecho el gran negocio en lo económico en el aspecto político en todas las cosas que les han convenido, como obtener poder en donde no lo tenían y burlarse de la democracia, pero terminaron, ambos partidos por desinflarse como un globo, aunque siguen pensando que se han pasado la Constitución y las Leyes por la entrepierna, olvidando que los delitos contra la democracia, no quedan sin castigo, porque más tarde o mas temprano nuestra democracia algo tendrá que inventarse para limpiar el basurero y la podredumbre que nos arropa y desinfectar el sistema. Y acabar con los beneficiados con trampas.-
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Félix Cabrera agazajó a los periodistas dominicanos radicados en Nueva York.
