Por Johnny Arrendel
Una información publicada en el digital Vigilante Informativo da
cuenta de cancelaciones masivas en Multimedios del Caribe, que agrupa a NCDN,
El Caribe y otros medios de comunicación.
Este grupo parece atravesar por una profunda crisis económica
que empuja a la empresa a despedir al menos la mitad de su personal de la
redacción central, indica la info.
Desde el jueves, periodistas y fotógrafos reciben cartas en las
que les anuncian que han sido despedidos, según el portal, que cita fuentes
vinculadas a la empresa.
Entre los cesanteados se encuentran Esteban Delgado, quien se
desempeñaba como sub director; Máximo Jiménez, editor de Espectáculo; Mayra
Contreras, de la sección Gente y Nelson Mancebo, sub editor gráfico del
matutino.
Igualmente, la dirección de El Caribe dispuso las cancelaciones de los
periodistas Adalberto de la Rosa, Ángel Vargas, Oscar Quezada, entre otros,
dice El Vigilante.
Todo indica que esta ola de reducción de personal encubre el
fracaso que a todas luces constituye la incursión de Nuria Piera en este consorcio,
específicamente en la parte de televisión, con poderes extraordinarios en la producción.
Todo indica que las pérdidas se acumulan, se hacen insostenibles
y que por algún lado había que cortar.
Comenzaron por la parte impresa.
El poder discrecional de Piera llega al punto de que la cadena
de radio, televisión y multimedia CDN pasó a denominarse N-CDN, es decir, Nuria
CDN.
El “Huracán Nuria” se llevó por delante a su ex compañero
sentimental Pablo Mackiney y a Judith Leclerc, quien había posicionado su
proyecto experimental “Mil Historias”.
Desde que llegó a CDN, Nuria hostigó a Leclerc con la idea de
que era preciso cambiar el concepto de producción sustentado por su antigua
empleada, a quien no le quedó otra opción que retirarse y sin tener para entonces
otra televisora que le acogiera.
Pero paradójicamente, una vez fuera Leclerc, Nuria replicó el
concepto de producción que introdujo la capacitada periodista, y en su horario
colocó a Maria del Carmen Hernández, quien sin embargo no ha calado en el gusto
de la teleaudiencia.
Lo cierto es que el cambio de concepto de producción quien debió
aplicárselo es la propia Nuria Piera, quien en la actualidad da vueltas sobre
esquemas ya desgastados, que desde hace tiempo no impactan.
Su programa “Nuria”, que transmite en Color visión viene en
descenso desde hace mucho en los ratings, y su retransmisión por CDN aún antes
de que asumiera la dirección no le significó un repunte.
En cuanto a la parrilla que ha estructurado para NCDN, prácticamente
ninguno de los programas presentados por Nuria y su equipo ha logrado atrapar al
público. Al contrario, la planta ha perdido empuje en noticias, opinión y
deportes.
Para muestra, en el programa 50/50, con Checho Lora y Maruchy
Vigil, quienes comparten con David Collado, de emprendedores, el galardón como
los conductores más aburridos de la televisión dominicana.