El alcalde de Nueva York Michael Bloomberg abandonó su neutralidad y respaldó la reelección del presidente. La razón: el huracán le permitió entender que el cambio climático debe estar en la agenda
Crédito foto: AP
Sorpresivamente Michael Bloomberg, un político independiente, sentó postura respecto a la carrera por la Casa Blanca luego de pronunciarse en reiteradas oportunidades en contra de Barack Obama y Mitt Romney por considerar que ninguno había enfrentado los problemas que aquejan al país.
El giro en su postura ocurrió en los últimos días luego de que el huracán Sandy dejara medio centenar de muertos y destrozos millonarios en la costa este estadounidense. Y la clave fue el cambio climático.
Bloomberg considera que esa problemática contribuyó a generar la supertormenta y, en su opinión, Obama es el mejor candidato para hacerle frente.
"La devastación que el huracán dejó en Nueva York y en gran parte del
noreste puso los retos de las elecciones presidenciales en relieve",
escribió en un artículo de opinión para Bloomberg View.
"Nuestro clima está cambiando", advirtió. "Y si bien el aumento de
fenómenos meteorológicos extremos (…) puede o no ser el resultado de
ello, el riesgo debería ser suficiente para obligar a todos los líderes a
actuar de inmediato", agregó.
El anuncio del alcalde neoyorquino es otro indicio de que el huracán ha influido en la campaña presidencial y ha dado un nuevo nivel de urgencia a uno de los temas centrales de la contienda: el papel del Gobierno federal.
Al hacer público su apoyo, Bloomberg enumeró los diversos pasos que
Obama tomó en cuatro años para enfrentar el problema del cambio
climático, incluyendo las regulaciones que buscan reducir las emisiones de los vehículos y de las centrales eléctricas.
También citó otras razones para respaldarlo, incluido el apoyo del presidente al aborto y a los derechos de las parejas del mismo sexo.
El candidato demócrata, que ya logró lo apoyos de varios medios estadounidenses como The New York Times, Los Angeles Times y Miami Herald, sumó este jueves el respaldo de la prestigiosa revista británica The Economist.
En opinión de la publicación, "las elecciones se tratan de elegir a
alguien para dirigir un país y esta elección plantea dos preguntas:
¿cuán bueno fue Obama como presidente, especialmente en cuestiones clave
como la economía y la política exterior? y ¿puede América confiar realmente en que el cambiante Mitt Romney lo hará mejor?".
