Por Agustín de la cruz
El pasado jueves 18 de agosto se llevo a cabo la recepción en la residencia oficial de la Alcaldía de NY. Evento que se realiza cada año días antes de efectuarse el desfile Dominicano de Manhattan, aunque de manera inesperada en esta ocasión se velo el muerto después del entierro.
Quienes están acostumbrado asistir a esta importante recepción, han de saber cómo se manejan los niveles de protocolos y además podrán comparar esos mismos protocolos anteriores, con los de la recién realizada recepción.
Para comenzar el recibimiento al Sr Nelson Peña y su comitiva, a los oficiales electos y a los invitados en general fue realizado por el chef de cocina Sr. Adalberto Estévez, un dominicano con todos los meritos necesarios para ser considerado orgullo nuestro.Pero que paso con el acostumbrado recibimiento por parte de la secretaria y del propio alcalde el Sr. Michael Bloomberg.
Pero nadie puede negar que desde el entorno de nuestro alcalde se desprendiera esa noche un sentir que daba a entender molestia, y se hizo más notorio al momento de subir a su tarima y diferente a otras ocasiones, no se le permitió a nadie que lo acompañara. Lo de pergaminos y reconocimientos brillaron por su ausencia.
Nuestro alcalde ignoro a todos los oficiales electos, y personalidades distinguidas, pero peor aun ignoro a quien debería ser la persona de mayor trascendencia de la noche, por ser el presidente del desfile, razón por la que se efectuaba esa recepción, incluyendo las personalidades que fueron distinguidas por el Sr. Nelson Peña y el desfile.
El Sr. Bloomberg luego de exaltar la labor e importancia del dominicano en esta ciudad, solo se limito hacer mención y créditos, hacia los comerciantes que sirvieron de sponsor en dicho evento. Y fueron tan limitadas sus palabras que dejaban la impresión de hacerlo por obligación.
Cualquiera pensaría que el mensaje de la noche seria “Te invito por Obligación, si quieres no Vuelvas”, finalizada su comparecencia el Sr. Bloomberg bajo de esa tarima y rápidamente buscó por donde salir de su propia casa, en buen dominicano “como alma que lleva el diablo”.
Nos gustaría que alguien pudiera mostrar como en ocasiones anteriores fotos de esa recepción, al lado de nuestro alcalde Sr. Michael Bloomberg.
¿Responderá esa actitud de nuestro mayor Michael Bloomberg a los tantos conflictos del Sr. Nelson Peña y el desfile Dominicano?
¿Estará en decadencia la falta de confianza de nuestro mayor Michael Bloomberg hacia los organizadores del Desfile Dominicano de Manhattan?
¿Lo aquejaba algún malestar físico, o propio de sus responsabilidades cotidianas?
Sin lugar a dudas que cualquiera que haya sido la causa de ese mostrado malestar por parte de nuestro alcalde, ha creado un mal precedente con miras al futuro del Desfile Dominicano bajo la administración del Sr. Nelson Peña. (SoyLatino.net)