La crisis en la música causada por el coronavirus comenzó desde enero en Asia, cuando Live Nation, la promotora más grande de eventos en el mundo, propietaria además de Ticketmaster, ya registraba la cancelación de eventos, entre los que estaban las presentaciones de agrupaciones famosas como: GOT7, TWICE, Suchmos y la Orquesta Sinfónica de Boston. Febrero fue un colapso que nadie pudo anticipar en ese territorio. A las cancelaciones de eventos que se realizarían en enero, se sumaron otras de grupos locales e internacionales como Green Day y Pixies.
A la fecha, se han cancelado cientos de shows no solo en Asia, sino en todo el mundo, afectando tanto a grandes empresas de entretenimiento como Live Nation y AEG Presents, sino también a promotores locales.
Forbes estima que este año podrían perderse más de 5 mil millones de dólares a causa de las cancelaciones en todo el mundo, pero la cifra parece prematura y optimista. De acuerdo con la firma consultora PricewaterhouseCoopers LLC, el 2020 sería el mejor año para los eventos musicales en vivo, al generar 28.8 mil millones de dólares. De no renovarse las actividades, las pérdidas directas podrían rozar esos números, sin contar los afectados indirectos. Algo sólo comparable con las pérdidas que, en febrero, estimaba la Asociación Internacional de Transporte Aéreo para las aerolíneas (30 mil millones de dólares; cifra que elevó a 113 mil millones).
Posponen el Corona Capital GDL por COVID-19
El show no puede continuar
El 2020 apunta a ser el año del gran colapso en la industria de la música en vivo. Lo dicen el número de conciertos cancelados o suspendidos.
Para cuando la pandemia fue declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 11 de marzo de 2020 —con 118 mil casos confirmados, la mayoría en China—, ya se habían suspendido importantes giras en todo el mundo, en especial en Europa.