A 37 años de su muerte, Alfred Hitchcock sigue siendo uno de
los mejores cineastas británicos, pionero en técnicas utilizadas en el
cine de suspenso. Por ello recordaremos el legado del director, el cual
hoy en día sigue siendo venerado por el público.
“EXTRAÑOS EN UN TREN”
Esta cinta fue dirigida por Alfred en 1951, poco tiempo
después de su llegada a Hollywood. A medida de que se va desarrollando
la historia con tintes policiacos, se puede apreciar la problemática y
desesperación de los personajes principales.
La trama se centra en dos extraños que se encuentran por
casualidad en el mismo vagón de un tren. Tanto Guy Haines (Farley
Granger), como Bruno Anthony (Robert Walker) llevan una vida que en
realidad no les da la felicidad que ellos desean. Durante el viaje, los
dos desconocidos tienen una charla un trato escalofriante.
En la conversación, Bruno le propone un pacto a Guy que
consiste en que ambos asesinarían a un miembro de la familia del otro,
pues concluyeron que tanto el padre de Anthony como la esposa de Haines
les complicaban a ambos la vida.