(CNN) - Los servicios de inteligencia de Estados
Unidos llegaron a la conclusión, en un informe desclasificado
publicado este viernes, que el presidente de Rusia, Vladimir Putin,
ordenó una "campaña de influencia" para desprestigiar a Hillary Clinton y
ayudar al presidente electo Donald Trump en las elecciones
presidenciales de 2016.
La campaña, que consistió en hackear a
grupos e individuos demócratas, incluido el presidente de la campaña de
Clinton, John Podesta, y publicar esa información a través de sitios web
de terceros, fue "una escalada significativa" en los intentos que Rusia
lleva a cabo desde hace tiempo para minar el "orden democrático liberal
que lidera Estados Unidos", según el reporte.
Este documento es la primera información oficial, completa y pública
de la comunidad de inteligencia estadounidense sobre su evaluación de
las actividades cibernéticas rusas durante la campaña de 2016 y
sus motivaciones.