Como algunos de ustedes saben, en el día de ayer, el primer ministro de
Haití, Paul Evans, hizo pública una nota en la que habla sobre la
repatriación de 21 personas de nacionalidad haitiana que habrían sido,
según el texto, “arrestados en sus casas” y deportados a pesar de contar
con la debida documentación.
En nombre del gobierno dominicano, y tras haber corroborado esa información con todas las instituciones competentes en la materia, debo informarles que esas afirmaciones son rotundamente falsas.
Los hechos que describe esa nota sencillamente no ocurrieron y ninguna persona ha sido deportada de la República Dominicana. Repito, nuestro país no ha puesto en marcha ninguna deportación. Por tanto, no hay base alguna para sostener las afirmaciones de ese comunicado.
Precisamente, en la versión digital del diario El Caribe, en el día de hoy se informa que dos periodistas y un fotógrafo “enviados al país del reconocido periódico haitiano Le Novelliste afirmaron este viernes que no han constatado un solo caso de deportación de sus compatriotas residentes en este lado de la frontera”.
Desconozco los motivos que están llevado a algunos funcionarios del gobierno haitiano a realizar declaraciones falsas y a sostener una campaña negativa contra la República Dominicana. Campaña que, cabe añadir, también va en contra de los intereses de su propia gente.
Lo que sí puedo afirmar es que el gobierno dominicano tiene un compromiso incuestionable con el respeto a los derechos humanos y que seguiremos siendo fieles siempre a ese compromiso, con todas las personas que habitan en nuestro territorio, independientemente de su nacionalidad.
Emplazo, por tanto, a los responsables de estas declaraciones a realizar el necesario desmentido de las mismas y así, contribuir a la verdad y al necesarios respeto entre nuestros países.
Nuestro Gobierno ha tenido en todo momento completa disposición al diálogo y a la cooperación con nuestra vecina República de Haití.
Tal disposición nos llevó el año pasado a iniciar un diálogo de alto nivel y firmar acuerdos de gran importancia para nuestros pueblos en torno a diferentes temas, como seguridad, agricultura, comercio y efectivamente, migración.
Kòm algouno nan nou konnen , yè , Minis Jadendanfan
Ayiti a, Pol Evans , te fè piblik yon nòt ki Abla sou rapatriman an nan 21 moun
ki nan ayisyen nasyonalidad ki ta yo te , selon TEKS yo, " arete nan yo
kazas "ak anyen depòte malgre li te gen dokiman apwopriye.
En nombre del gobierno dominicano, y tras haber corroborado esa información con todas las instituciones competentes en la materia, debo informarles que esas afirmaciones son rotundamente falsas.
Los hechos que describe esa nota sencillamente no ocurrieron y ninguna persona ha sido deportada de la República Dominicana. Repito, nuestro país no ha puesto en marcha ninguna deportación. Por tanto, no hay base alguna para sostener las afirmaciones de ese comunicado.
Precisamente, en la versión digital del diario El Caribe, en el día de hoy se informa que dos periodistas y un fotógrafo “enviados al país del reconocido periódico haitiano Le Novelliste afirmaron este viernes que no han constatado un solo caso de deportación de sus compatriotas residentes en este lado de la frontera”.
Desconozco los motivos que están llevado a algunos funcionarios del gobierno haitiano a realizar declaraciones falsas y a sostener una campaña negativa contra la República Dominicana. Campaña que, cabe añadir, también va en contra de los intereses de su propia gente.
Lo que sí puedo afirmar es que el gobierno dominicano tiene un compromiso incuestionable con el respeto a los derechos humanos y que seguiremos siendo fieles siempre a ese compromiso, con todas las personas que habitan en nuestro territorio, independientemente de su nacionalidad.
Emplazo, por tanto, a los responsables de estas declaraciones a realizar el necesario desmentido de las mismas y así, contribuir a la verdad y al necesarios respeto entre nuestros países.
Nuestro Gobierno ha tenido en todo momento completa disposición al diálogo y a la cooperación con nuestra vecina República de Haití.
Tal disposición nos llevó el año pasado a iniciar un diálogo de alto nivel y firmar acuerdos de gran importancia para nuestros pueblos en torno a diferentes temas, como seguridad, agricultura, comercio y efectivamente, migración.