“La paciencia es la fortaleza de los débiles y la prisa la debilidad de los fuertes. El que alega un hecho en justicia tiene que probarlo y yo no he visto las pruebas todavía. Vamos a esperar que presenten la acusación, porque una cosa es hacer declaraciones ante la opinión pública y otra cosa es presentar una acusación ante un juez”.
Las palabras son del presidente de la Cámara de Cuentas, Hugo Álvarez, tras el allanamiento hecho por el Ministerio Público a ese órgano fiscalizador durante once horas ayer lunes.
Álvarez dijo que los fiscales intervinieron computadoras, el servidor y una serie de documentos muy necesarios para el trabajo de la Cámara de Cuentas, por lo que ellos van a evaluar y cuando se reúna, darán una declaración de prensa y tomarán las medidas de lugar.
Dijo que mientras tanto ellos tienen la presunción de inocencia que es un derecho constitucional.
Detalló que en los cuatro años que tiene el pleno de la Cámara de Cuentas han concluido 161 auditorías, han presentado 25 informes especiales que están en el ministerio público y hay 22 auditorias que están en la dirección jurídica, que están atrasadas y por esta situación (el allanamiento), es posible que no podrán procesar.
Aseguró que nunca se han negado a entregar documentaciones al Ministerio Público, y que antes de comenzar la investigación él fue cuatro veces a la Procuraduría y llevó toda la documentación. “Y la que ellos han pedido se le ha ido suministrando. Por ejemplo si ellos piden los videos de los cuatro años, eso es un proceso. Hubo que comprar un disco duro que se le llevó la semana pasada y se le ha ido aportando todo lo que ellos han ido solicitando”.
Luego de un allanamiento de más de once horas en la Cámara de Cuentas, en actos dentro de la denominada "Operación Caracol", el director de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, aseguró ayer que encontraron evidencias de “maquillaje” de auditorías.