Mostrando su fe y devoción por la Virgen de la Altagracia, más de tres mil dominicanos participaron en la misa altagraciana que marcó el inicio del Mes de la Herencia Dominicana y a la cual asistió el cónsul general de la República Dominicana en Nueva York, Carlos Castillo, quien destacó la importancia de que el acto religioso se realizara en su 46 versión en esta metrópoli.
Durante la misa, la cual tuvo como oficiante principal al obispo auxiliar de la Diócesis de Santiago de los Caballeros, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, en la Catedral San Patricio de esta urbe, los feligreses “enarbolaban con orgullo y júbilo la bandera nacional en pequeñas astas donadas por el cónsul”.
“Tenemos la satisfacción de que los dominicanos abarrotamos hoy esta hermosa e histórica catedral, en la cual se puede acomodar hasta tres mil personas, lo que es una demostración más de que veneramos a Nuestra Señora de La Altagracia como la auténtica madre protectora espiritual de la República Dominicana”, dijo Castillo, quien asistió acompañado por su esposa, Karen Haché de Castillo.
Precisó, al ser entrevistado por reporteros de medios televisivos, radiales y escritos al terminar el acto religioso, que como cónsul general representante del Gobierno que preside Danilo Medina, agradece la participación de los dominicanos en las actividades de celebración.